La mayoría de los árbitros de CLM ha emitido un comunicado en el que denuncian el estado calamitoso por el que según ellos está atravesando la competición debido a la deuda que la Federación mantiene con ellos. Según esta denuncia, «comienzan a aparecer las primeras tensiones en los campos regionales entre árbitros, Federación y equipos».
Y acusan al director general de Deportes, Juan Carlos Martín, de apoyar a la Federación en el incumplimiento de las obligaciones federativas con este colectivo, justificándola.
Este es el contenido íntegro del comunicado público de los árbitros de baloncesto de Castilla-La Mancha:
«Los despropósitos y las mentiras siguen actuando en el baloncesto castellano manchego y comienzan a aparecer las primeras tensiones en los campos regionales entre árbitros, federación y equipos.
El grueso mayoritario de los árbitros de Castilla la Mancha siguen en huelga a la espera que la FBCLM les abone la totalidad de la deuda, que como su presidente, Ramón Granados, anunció en Radio Castilla la Mancha el 26 de septiembre, conseguirían hacerlo antes del 1 de noviembre. Por enésima vez la FBCLM vuelve a mentir a sus árbitros puesto que no les ha pagado la deuda. No es menos cierto que han abonado partidos escolares, regionales, fases y amistosos de la temporada 2012 – 2013 y los meses de noviembre y diciembre de la temporada 2013-2014. Pero esa cuantía no asciende ni al 30% de la deuda, y que debe corresponde curiosamente a unos 75.000 euros, que por otro lado coincide con la subvención que les aportó la JCCM a finales de verano, por lo que el colectivo arbitral se vuelve a sentir engañado por su federación y su presidente.
No solo se sienten engañados por ellos, si no que también se sienten abandonados y desprotegidos por la Dirección General de Deportes de Castilla-La Mancha Juan Carlos Martín, director general a la cabeza, los cuales siempre han manifestado estar cercanos a ellos pero que a la hora de la verdad les dan la espalda. El director general Juan Carlos Martín comentó en entrevista realizada en la cadena Ser Guadalajara el día 25 de septiembre que si la FBCLM no hacía un guiño importante a los árbitros en el tema económico tomarían cartas en el asusto y agotarían todas las vías posible para que este conflicto se solucionara.
Pues bien, después de la intervención de Ramón Granados en las ondas la Dirección General de Deportes, recula y decide darle una tregua más a la FBCLM, tanto es así que el director general de Deportes de Castilla-La Mancha, en una entrevista hecha en “A pie de cancha” (Albacete) el día 16 de octubre de 2014, dice que la FBCLM está abonando al colectivo arbitral la deuda y que hay que esperar a terminar de ver los ejercicios económicos de dicha federación para ver si abona por completo la deuda. Para ello se ampara en que la federación reconoce una deuda de 150.000 euros y en que ya ha abonado 80.000 euros.
Ante esta situación los árbitros en huelga se mantienen aun más firmes en su decisión de no arbitrar por dos motivos; uno, porque la FBCLM miente descaradamente ya que la deuda no es de 150.000 euros y dos, porque la Dirección General de Deportes, teniendo en sus manos un documento, proporcionado por el colectivo arbitral, en donde se puede apreciar claramente que la deuda es mayor, encubre la mentira de la FBCLM. En esta línea el colectivo arbitral sigue reclamando transparencia y legalidad en todas y cada una de las acciones.
En relación a lo meramente deportivo, resulta cuanto menos curioso diferentes situaciones que se están dando en nuestra comunidad. Los clubes de las distintas provincias están manteniendo reuniones para ver de que manera se pueden buscar soluciones a esta situación y poder disfrutar de un baloncesto limpio y transparente. Las distintas competiciones se están cubriendo, pero a costa de qué?, de que los partidos se arbitren por personas que no tienen la categoría adecuada, por personas que no tienen licencia arbitral expedida por su fbclm, a costa de que parejas arbitrales doblen y tripliquen partidos y como consecuencia de ello se llegue tarde a los lugares de trabajo. Se empiezan a dar situaciones desagradables en los campos fruto del despotismo de árbitros no cualificados para realizar esta labor. Aparecen las primeras denuncias y demandas entre jugadores, árbitros, federativos…. El deporte del baloncesto en Castilla-La Mancha se desquebraja y ni federación ni junta de comunidades mueven ficha para solucionarlo».