Emiliano García-Page, secretario general del PSOE de CLM, ha constatado hoy “la ilusión, la corriente de fondo que ya hay en Castilla-La Mancha y el compromiso de muchos ciudadanos para que el 24 de mayo de 2015 se pueda decir con tranquilidad que la presencia de Cospedal en Castilla-La Mancha ha sido larga y una pesadilla».
Page ha hecho estas declaraciones durante la Asamblea Abierta con jóvenes en la que ha participado junto al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, celebrada en Toledo.
Page ha asistido a un encuentro con jóvenes en Toledo junto a Pedro Sánchez.
Page ha vuelto a pedir a Cospedal un debate «no para hablar de empleo y educación, que lo tiene difícil e imposible, sino para hablar de mis cuentas corrientes, de mis dos coches y de mi piso de 84 metros cuadrados. Porque quiero ser coherente, humilde, sensato y estar con la gente que más l o necesita».
El líder y candidato del los socialistas castellano-manchegos también ha querido reivindicar el papel del PSOE en la modernización de España y de Castilla-La Mancha. Al respecto ha dicho que «el PSOE es el partido del cambio sensato y no puede dejar de reclamarse como el partido del cambio, siempre aspirando a más, a cambiar con sensatez, con sentido común, porque sin sentido común no hay cambio, hay frustración».
También ha pedido autocrítica para no decir amén a todo y capacidad de reacción sensata ante la desigualdad e injusticia.
SOBRE LA CONSULTA CATALANA
Page ha dicho por otro lado que le «importan más las personas que los territorios», por eso dice que está «más cercano a un humilde trabajador de Girona o Daimiel que a un hacendado de Sevilla o de aquí».
En este sentido, Page ha manifestado: «Me siento español y por eso me siento catalán. Me siento orgulloso de que Cataluña haya sido locomotora económica y social de España, pero, al mismo tiempo, tengo que decir que las personas están por encima de los territorios. Estoy más cercano a un humilde trabajador de Girona o Daimiel que a un hacendado de Sevilla o de aquí».
Page también ha destacado que «las relaciones entre España y Cataluña no pueden quedar al margen del diálogo» y por eso ha querido agradecer a Pedro Sánchez y a los compañeros del PSC «su apuesta por ser un puente de concordia».