Tener una bodega en casa no es fácil, pero es posible. La Denominación de Origen La Mancha da una serie de consejos para lograr el objetivo.
Montar una bodega en casa es relativamente sencillo si se sabe cómo hacerlo. La Denominación de Origen La Mancha da una serie de indicaciones a tener en cuenta para conseguir mantener un buen vino.
En primer lugar, las botellas deben guardarse en posición horizontal, salvo en el caso de algunos vinos finos que exigen la posición vertical. Además, «la humedad ambiente debe ser entre un 65 y un 70 por 100» y la luz tiene que ser «escasa o nula». En cuanto a la temperatura, la ideal es que esté entre los 13 y 17 grados centígrados.
El lugar donde se encuentren los vinos debe estar «limpio y sin olores extraños y es importante evitar ruidos y vibraciones».
A la hora de elegir los vinos, «es un error bastante extendido pensar que todos mejoran con el paso del tiempo», pero desde la Denominación de Origen dan unas pautas. Si se trata de jóvenes, «al ser frescos y afrutados, deben consumirse dentro de la campaña en la qeu se han producido» principalmente para disfrutar de su aroma y sabor.
En cuanto a los vinos de elaboración tradicional, que tienen «una vida natural mucho más larga que la de los jóvenes», se recomienda su consumo en un periodo que no supere los tres o cuatro años.
Otra cosa son los vinos de crianza, reserva o gran reserva, si bien la Denominación recuerda que «guardar un vino durante un número de años excesivos es más propio de coleccionistas que de consumidores porque existe un riesgo considerable de que acabae echándose a perder».
Dos consejos más, si se opta por una bodega en un chalet o un garaje, «es aconsejable recurrir a un experto para que nos asesore sobre orientación, aislamineto, tipo de suelo…» Y si se opta por un piso, «es preferible el uso de muebles guarda-vinos ya que aseguran el mantenimiento más correcto para los vinos».
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