El fiscal ha pedido una condena de 18 años de cárcel para un joven que ha sido juzgado en Ciudad Real acusado de abusar de una menor de 12 años, mientras que la acusación particular ha demandado una pena de 20 años de prisión y el abogado defensor su libre absolución.
En la segunda jornada de la vista, el fiscal ha mantenido la petición de 18 años de cárcel para el procesado, un joven de 19 años de Alcázar de San Juan, como presunto autor de cuatro delitos de abusos sexuales a una menor en 2012.
El representante del ministerio público ha mantenido su consideración de que los hechos constituyen un delito de abusos sexuales, aunque ha tenido en cuenta la comparecencia de la atenuante de «anomalía o alteración psíquica», porque en el momento de cometer los hechos «tenía un pensamiento empobrecido y lento, con una importante inmadurez mental».
La menor (que ahora tiene 15 años de edad) declaró ayer en la vista que el acusado la sometió a abusos sexuales, mientras que el acusado negó los cargos que se le imputan, que según el escrito de la Fiscalía tuvieron lugar a principios de 2012.
En su comparecencia, la menor declaró haber sufrido abusos sexuales entre febrero y marzo de 2012, que el acusado negó tajantemente.
El abogado del acusado explicó que el procesado, que en el momento de los hechos tenía 18 años, se vio cinco veces con la denunciante y que en su corta relación no hubo ni abusos ni agresiones sexuales como asegura la menor.
Según la defensa, en el juicio se ha puesto de manifiesto que la víctima mentía, como se apunta en un informe forense que pone de manifiesto que existían contradicciones, por lo que ha pedido la libre absolución de su defendido.
Por su parte, la acusación particular ha solicitado que el procesado sea condenado a una pena de 20 años de prisión y a pagar una indemnización de 12.000 euros a la menor, por los daños morales sufridos.
La acusación particular ha mantenido que el acusado cometió presuntamente estos delitos de abusos sexuales «no consentidos» y considera que así ha quedado probado con las diferentes pruebas periciales.
Además, la letrada de la acusación particular ha señalado que la menor «ha mantenido la incriminación en todo momento, con una declaración verosímil, sin variar su versión y sin incurrir en contracciones».
La fiscalía, por su parte, mantiene su acusación inicial hacía el joven de los delitos de violación, aunque aplica la atenuante de «anomalía o alteración psíquica» porque en el momento de cometer los hechos «tenía un pensamiento empobrecido y lento, con una importante inmadurez mental».