Un hombre de 55 años fue detenido el pasado jueves en Guadalajara después de que su esposa dijera a los agentes de la Policía Local que le había agredido, produciéndola heridas tanto en la cara como en los labios.
Hechos que se produjeron sobre las ocho y media de la tarde, cuando los agentes tuvieron conocimiento de que una señora lloraba y pedía auxilio en su casa de la calle Santander. Una vez allí, se encontraron a la mujer con las heridas antes citadas, por lo que detuvieron en el mismo domicilio a su marido, de 55 años.
Ella fue trasladada a un centro médico para que fuera atendida de las heridas y se instruyeron las pertinentes diligencia en la Comisaría de Policía Nacional.