Los alcaldes de los ayuntamientos de Retuerta de Bullaque (PSOE), Hontanar (PSOE) y Navas de Estena (IU) y los grupos Ecologistas en Acción, SEO/Birdlife y WWF-España han suscrito un acuerdo «para implantar con plenas consecuencias y garantías de la figura de Parque Nacional en Cabañeros».
Así lo han dado a conocer los alcaldes de este municipio, que han explicado a Efe que el acuerdo se ha concretado tras diversas reuniones entre las partes y se plantea como un punto de partida necesario para que el Parque Nacional «recupere el prestigio perdido tras los últimos acontecimientos que le han afectado».
La idea del acuerdo es servir de aglutinante de los distintos sectores que creen en el Parque Nacional como motor de la conservación de la naturaleza y del desarrollo sostenible de sus municipios, por lo que está abierto a la incorporación de más firmantes, fundamentalmente del resto de ayuntamientos, sin los cuales el desarrollo del acuerdo, han dicho, «va a tener enormes dificultades».
El acuerdo sostiene que el Parque Nacional de Cabañeros, próximo a cumplir 20 años desde su creación, «se encuentra en una encrucijada de la que debiera salir reforzado como Parque Nacional y para cumplir los anhelos y expectativas que la población local siempre ha fijado sobre él».
Por ello, las organizaciones ecologistas y los ayuntamientos firmantes se han comprometido a poner en marcha una dinámica de trabajo con reuniones periódicas que permita impulsar la figura de Parque Nacional de Cabañeros «como emblema y ejemplo de la conservación de la naturaleza en España y, a la par, el desarrollo armónico de los municipios de su zona de influencia socioeconómica».
IMPACTO ECONÓMICO Y SOCIAL
Asimismo, instan a las administraciones responsables del parque nacional a que arbitren las fórmulas necesarias para que se palíe el eventual impacto económico y social que se produzca en los municipios por la instauración con plenas consecuencias de la figura de Parque Nacional en Cabañeros.
En este sentido, se pide a la Junta de Comunidades y al Gobierno central un programa de medidas de ecodesarrollo para los municipios del Área de influencia del Parque que «palíe la merma de ingresos que la supresión de la caza en el Parque Nacional suponga a una parte de la población activa de los municipios».
Dentro del programa, entre otras medidas, plantean la realización de actividades tradicionales compatibles con la conservación del parque nacional y el fomento de su uso como recurso ecoturístico o la ampliación urgente de los retenes forestales de ambas administraciones.
Igualmente, piden que los beneficios sociales y económicos, si los hubiera, resultantes del control de poblaciones de ungulados redunde directamente en los municipios y sus vecinos, en la forma en que se acuerde con el Organismo Autónomo de Parques Nacionales.
También creen que es necesario avanzar en una decidida naturalización del espacio físico de Cabañeros, recuperando los elementos naturales de fauna y flora que son propios del ecosistema de monte mediterráneo y eliminando progresivamente aquellas infraestructuras como los vallados que impactan sobre los valores naturales del parque nacional.
A tenor de todas estas peticiones, consideran que es «innecesaria e incluso contraproducente para los objetivos anteriores la inclusión de la enmienda 278 en la nueva Ley de Parques Nacionales, entendiendo que se debe retirar».
Lo que Cabañeros necesita, han asegurado, «es que se aplique la normativa que lo ampara y liquidar de forma justa y equitativa las indemnizaciones a las que hubiera lugar por derechos legalmente reconocidos, tanto de propietarios públicos como de privados».