Según una información publicada hoy por el diario El Mundo, el joven conductor que atropelló a tres menores en Fuensalida (Toledo) el pasado sábado ingresó en prisión por orden del juez después de que los familiares de unas de las chicas, Michelle, intentaran tomarse la justicia por su mano, ya que fueron a las instalaciones de la Guardia Civil en Torrijos tras enterarse de que el conductor se encontraba allí.
Siempre según la citada información, los familiares de Michelle gritaban: «Déjanoslo a nosotros». La Guardia Civil habría evitado que entrase nadie en el cuartel.
Entre los referidos familiares que reclamaban su justicia particular, había algunas personas con antecedentes penales por delitos violentos.
Además, se ha dado la trágica casualidad de que el pasado mes de julio, la madre de Michelle atropelló a un niño rumano, que murió a causa del accidente, ocurrido también en Torrijos. Fue entonces la madre y su familia los que sintieron el acoso de los familiares del niño, un clan de rumanos que intentó tomarse la justicia por su mano actuando contra ella, lo que evitó la Guardia Civil. La enemistad entre ambas familias creció hasta que los rumanos se fueron de Torrijos.
La Guardia Civil salió a la calle para pedir calma. La tensión no se calmó precisamente cuando el joven fue trasladado ante el juez de instrucción, pero los familiares de Michelle ya sabían de quién se trataba. En el juzgado el instructor decidió enviar a prisión comunicada al conductor bajo la acusación de homicidio por imprudencia grave del conductor, tras confirmarse que los análisis de sangre, cuyo resultado fue de 0,26 por 100, no daban para que los hechos fuesen constitutivos de delito, sino de falta administrativa.
Además de haber indicios para acordar prisión preventiva, en la decisión del juez habría influido decisivamente el riesgo a que estaba expuesto el joven de haber quedado en libertad, dado el ánimo de venganza de los familiares de Michelle y el hecho que de sabían quién era y dónde vivía.
LA DELEGACIÓN DEL GOBIERNO DE CLM NO TIENE CONSTANCIA DE LOS HECHOS
Puestos al habla con la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha, no confirman la veracidad de estos hechos. No tienen constancia de que ocurrieran y añaden que por ahora no hay novedades en torno a la investigación.