La fibra óptica ha crecido en un año un 140 % en el conjunto de España, pero su despliegue se ha centrado en las ciudades de más de medio millón de habitantes, mientras que en comunidades como Castilla-La Mancha su implantación es «prácticamente testimonial».
Según un informe de Comparaíso.es, el comparador de banda independiente para los consumidores españoles, en las ciudades con más de medio millón de personas el 86 % de los hogares tiene fibra óptica mientras que en los municipios entre 100.000 y 500.000 residentes el porcentaje cae al 31 %
En las ciudades con una población entre 50.000 y 100.000 vecinos, la fibra óptica es factible sólo para el 20 %.
El informe también señala que la peor parte se la llevan los municipios con menos de mil habitantes «donde directamente no hay fibra óptica», por lo que les denomina «los auténticos consumidores olvidados».
A ello se suma, según el comparador de banda ancha, que estos núcleos tienen que conformarse con instalaciones hasta diez veces peores que ofrecen muchas menos prestaciones, pero prácticamente al mismo precio que la fibra óptica.
El informe pone de manifiesto que de septiembre de 2013 a septiembre de 2014, el número de líneas ha pasado de 509.316 a 1.222.163, es decir, un crecimiento del 140 %.
La fibra óptica que, de media, alcanza al 26 % de los hogares españoles parece ser patrimonio de las seis ciudades que cuentan con más de medio millón de habitantes mientras que, por autonomías, en Cantabria, La Rioja, Castilla y León y Castilla-La Mancha puede considerarse «prácticamente testimonial».