La Guardia Civil ha detenido a diez personas, de entre 18 y 55 años, que formaban parte de un clan familiar «muy peligroso» dedicado al tráfico de drogas en Santa Olalla (Toledo) y actuaban como organización estructurada piramidal haciendo uso de armas de fuego para defenderse de otras organizaciones criminales.
El Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de Toledo, en el marco de la operación ‘Machacao’, ha detenido a estas personas por los delitos de tráfico de drogas, defraudación eléctrica y de agua, y tenencia ilícita de armas, ha informado la Guardia Civil.
Un clan familiar con una estructura piramidal
A finales del año 2023, los agentes comenzaron a recopilar información sobre un clan familiar «muy peligroso», afincado en tres viviendas de Santa Olalla que podría estar dedicándose al tráfico de drogas.
Desde el inicio de las investigaciones se comprobó que la organización criminal estaba liderada por miembros de la misma familia, y se dedicaba a coordinar, planificar y ejecutar las operaciones para organizar los lugares donde el grupo poseía plantaciones de cannabis sátiva, además de contar con personas que se encargan de su cuidado, vigilancia y posterior empaquetado de las sustancias para su puesta en venta.
El clan tenía una estructura claramente piramidal dividida en tres niveles dentro de los cuales cada miembro tenía un papel claramente identificado.
Para la protección de la droga, los miembros de la organización no dudaban en hacer uso de las armas de fuego para defenderse ante posibles intentos de sustracción de la droga por parte de otras organizaciones criminales.
Marihuana, cocaína, hachís….
Los registros en los tres inmuebles lo llevaron a cabo los agentes encargados de las investigaciones con el apoyo del Destacamento de Fiscal y Fronteras de la Comandancia de Toledo, el Equipo Roca de Torrijos (Toledo), el Grupo de Reserva y Seguridad 1 de Madrid, la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Ciudad Real, el Servicio Cinológico de El Pardo y de la Comandancia de Toledo, personal de Conducciones y Seguridad Ciudadana.
En total, se han intervenido 4.633 plantas de marihuana en avanzado estado de desarrollo, 5 kilogramos de inflorescencia (cogollos) ya secos listos para su distribución, 17 gramos de cocaína, 8 bellotas de hachís y cuatro armas de fuego, entre las cuales hay un subfusil tipo AK-47 y tres armas cortas en perfecto estado, una de ellas sustraída, así como abundante munición de diverso calibre, algunos de ellas de guerra.
También se han intervenido dos carabinas de aire comprimido, tres armas blancas de gran tamaño. 9.308 euros en efectivo en billetes de diferente valor, 48 relojes de alta gama, diversas placas de matrícula tanto españolas como extranjeras, un inhibidor de frecuencia, una pistola táser y una defensa extensible.
Los detenidos han pasado a disposición judicial del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Torrijos.