El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha pedido hoy en su mensaje de Navidad que este próximo 2015 sea el año de la recuperación de la igualdad y la solidaridad para la sociedad española y, sobre todo, «el de la intolerancia absoluta a la mentira».
García-Page ha asegurado en el mensaje difundido a los medios que una sociedad con sus responsables públicos instalados «en la soberbia y el autoritarismo» es una sociedad «condenada al fracaso».
Ha transmitido «ánimo, esperanza y capacidad de superación» para todos los ciudadanos y ha recordado que la solución a muchos de los problemas actuales de España y de Castilla-La Mancha depende de los propios ciudadanos.
«Lo peor que podríamos pensar a estas alturas es que podamos pensar que no depende de nosotros lo que vaya a pasar el próximo año», ha apuntado, ya que la recuperación de la confianza política y de las instituciones «no va a depende de un presidente, de un alcalde o de muchos, sino que va a depender de todos».
Para García-Page, en 2015 «la decisión la vamos a tener todos», porque es un año importante «para cambiar el rumbo de las cosas, para poder enderezar algunas muchas y mejorar otras que afortunadamente empiezan a ir mejor.
Sobre 2014, ha reconocido que ha sido «un año difícil y seguramente para muchos malo o uno de los peores», y ha apelado a la unidad para que «entre todos busquemos la auténtica recuperación de la sociedad».
«No podemos hablar de recuperación cuando las generaciones actuales saben que van a vivir, como mucho, igual que sus padres o incluso como sus abuelos, que lo hicieron peor; sólo se puede hablar de un país en progreso y recuperación cuando su economía se basa en la justicia», ha indicado.
El alcalde de Toledo ha manifestado que la única manera de lograr justicia social es recuperando como prioridad la solidaridad y ha explicado que para propiciar igualdad de oportunidades hay que empezar por «un empleo digno, sostenible y que genere riqueza».
En este sentido, el alcalde de Toledo ha pedido que la igualdad y la solidaridad «sean algo más que una frase navideña» y se consoliden como una «conducta» del político.
«La actitud de la política» debe ser «ejemplar» tanto en la calle como en los despachos, ha dicho García-Page, quien se ha puesto a disposición de todos los ciudadanos «desde lo pequeño a lo más grande para dedicarme en cuerpo y alma a salir adelante».