La Consejería de Bienestar Social y la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) han suscrito un convenio de colaboración que el rector de la institución académica, José Julián Garde, ha considerado «un ejemplo a seguir» a nivel regional y, sobre todo, estatal: «Buscar el apoyo de la universidad para el desarrollo de proyectos de investigación» y, en base a los resultados, «desarrollar políticas públicas más eficientes».
Así lo ha destacado Garde este jueves en rueda de prensa con motivo de la firma de este convenio, que ha rubricado junto a la consejera del área, Bárbara García Torijano, y cuyo trabajo va a estar liderado por el grupo de investigación de la UCLM de Economía, Alimentación y Sociedad, vinculado al Centro de Estudios Sociosanitarios de Castilla-La Mancha.
El rector ha explicado que, mediante este acuerdo y gracias a la cesión de datos por parte de la Consejería, se va a proceder al análisis de la situación de las personas mayores en situación de dependencia, así como a analizar el mercado laboral en las residencias de mayores y la incidencia de factores como el tamaño o su ubicación en el medio rural y el medio urbano; con el objetivo de «intentar diseñar de manera conjunta un nuevo modelo de gestión».
Garde ha aseverado que las relaciones entre ambas instituciones son «positivas» y que «van a más», en beneficio de las personas que viven en la comunidad autónoma y, en este contexto, ha considerado que «estamos ante un ejemplo de lo que debería prodigarse mucho más».
Compromiso con la mejora de la calidad de vida de los castellanomanchegos
En la misma línea se ha pronunciado la consejera de Bienestar Social, quien ha asegurado que este acuerdo se suma a otras actividades que ya desarrollan de manera conjunta ambas instituciones y ratifica «el compromiso» del Gobierno regional y de la UCLM para mejorar la calidad de vida de los castellanomanchegos.
García Torijano ha explicado que, a través de este convenio, la Consejería de Bienestar Social trasladará a la UCLM los datos de los que dispone para que pueda llevar a cabo sus estudios y aportar evidencias.
«Nadie mejor que la Universidad de Castilla-La Mancha para analizar la situación actual y mirar hacia el futuro (…) para saber cuáles son las necesidades del mañana y poder anticiparnos a ellas de forma compartida», ha resaltado.
Asimismo, la titular de Bienestar Social ha precisado que este acuerdo tiene varios objetivos: establecer programas de investigación en el ámbito de la dependencia y los cuidados en Castilla-La Mancha, desarrollar actividades formativas destinadas a sensibilizar a estudiantes universitarios sobre el envejecimiento y la dependencia, ayudar a elevar la producción científica de la región en relación con la atención a la dependencia y evaluar la eficacia de actividades preventivas destinadas a mejorar la salud de la población.
García Torijano también ha detallado que, en la actualidad, hay un total de 73.849 personas con dependencia en Castilla-La Mancha, donde se han superado las 100.000 prestaciones, lo que ha supuesto «más que duplicar la atención respecto a 2015», y ha añadido que el reto del Gobierno regional es alcanzar las 115.000 prestaciones para 2027.
Además, ha subrayado que, «con mucho esfuerzo y trabajo colectivo», Castilla-La Mancha ha obtenido «la mejor nota» en esta materia, un 8,3, según el Observatorio Estatal de la Dependencia.