La presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha garantizado hoy que el plan integral de apoyo a la familia que prepara el Gobierno responderá a las demandas del país e impulsará ayudas y facilidades para que las mujeres puedan afrontar su maternidad.
Cospedal, en uno de los debates sobre «Familia e infancia» que se ha desarrollado en la convención nacional del PP en Madrid, ha apostado también por una reforma de la ley del aborto para asegurar que las menores «de ninguna manera» pueden abortar sin el consentimiento y el conocimiento de sus padres.
Por otro lado, Cospedal, defendió ayer el «compromiso incuestionable» de su partido contra la corrupción y contra aquellos «indeseables» que deshonran «el noble oficio de la política».
Cospedal recalcó que el PP ha sido, es y será «implacable» contra quienes no asuman la política como una vocación de servicio público.
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En la esencia del PP está la defensa de la familia y la maternidad», ha dicho Cospedal en este foro, en el que además los populares han puesto de manifiesto la importancia de las medidas para fomentar el empleo como la mejor política en favor de la familia y el estado de bienestar.
La presidenta de Castilla-La Mancha ha repasado además las medidas incluidas en el plan integral de apoyo a la familia aprobado en su comunidad en 2013 y dotado con 45 millones de euros, que ha definido como «precursor» del que va a acometer el Gobierno.
Un plan de apoyo a la maternidad para que «ninguna mujer», por difíciles que sean sus circunstancias económicas o sociales, se vea obligada «a no tener su hijo si quiere tenerlo».
Este programa incluye ayudas a las madres para afrontar los nacimientos, becas para que no tengan que abandonar sus estudios y un programa de asesoramiento en la época de gestación, además de incentivos a las empresas que no impidan a las madres progresar o las sancionen por la maternidad.
Por otro lado, «podemos decirlo alto y claro con la cabeza bien alta: nuestro compromiso contra la corrupción es absolutamente incuestionable», subrayó en sus palabras de ayer.
Ha recordado que el Gobierno del PP es el que ha aprobado una ley de transparencia y 70 medidas contra la corrupción, al tiempo que ha defendido «a ultranza» la honradez y la generosidad de aquellos políticos que trabajan día a día por mejorar la vida de sus pueblos y de sus ciudadanos.
El segundo reproche que ha lanzado Cospedal en su discurso ha sido para los secesionistas.
«La mayor amenaza ha sido el intento de fragmentar España desde el Gobierno de la Generalitat en un momento en el que teníamos que estar unidos trabajando para vencer la crisis», ha subrayado tras criticar la irresponsabilidad de los dirigentes independentistas que se han guiado por «ambición personal» o han intentado tapar así su incapacidad para solucionar los problemas de los ciudadanos.
«Ni hemos cedido, ni vamos a ceder nunca», ha asegurado Cospedal, quien ha recalcado que «la palabra miedo o amedrentarse no está en el vocabulario del PP».
La secretaria general de los populares ha hecho hincapié en que su partido tampoco ha cedido en la batalla contra la crisis y ha elogiado los resultados de la gestión del PP, que ha logrado que hoy ya haya crecimiento económico y se esté creando empleo frente a los «peores augurios».
Ha trasladado su agradecimiento a Mariano Rajoy por su «gran labor» al frente del Gobierno, que ha logrado que España vuelva a ser «un ejemplo para el mundo».
A su juicio, el esfuerzo de «toda una nación» por salvar el país de la quiebra y mantener la sociedad de bienestar «ha merecido la pena», aunque ha advertido que no se puede «bajar la guardia ni relajar esfuerzos» y que el PP aún necesita «más tiempo» para consolidar esos esfuerzos.
Cospedal ha arremetido también contra quienes pretenden dividir el país o contra a partidos que plantean que «no atendamos los compromisos con la deuda», en alusión a Podemos, y ha pedido al PP que recuerde las tres palabras que definen su hoja de ruta en «estos tiempos»: «estabilidad, confianza y unidad».
«Frente a la nada que supone el oportunismo, la nada de las ocurrencias y frente a la nada de populismos y demagogias», el PP ofrece, en palabras de su secretaria general, «estabilidad de un país fiable que crea empleo, confianza en un futuro mejor y la fortaleza de un proyecto construido entre todos los españoles».
Cospedal cree que el PP debe decir con claridad a los españoles que no «podemos dar marcha atrás» y que la sanidad, la educación o las pensiones no «se salvan con pancartas ni con camisetas», sino pagando facturas y teniendo una «idea clara del país que somos».
El recuerdo a las víctimas del terrorismo y al concejal de San Sebastián Gregorio Ordóñez, asesinado hace 20 años por ETA, ha estado presente en la última parte de la intervención de la secretaria general de los populares, quien ha sido tajante al afirmar que sólo por ellos no hay que «claudicar».
«No vamos a dar ni un paso atrás, da igual el color del pasamontañas o en nombre de quien se mate», ha dicho para concluir con una defensa de la memoria, justicia y dignidad para las víctimas.