Este hombre que ven en la fotografía… ¿Es un iluso? ¿Un inconsciente? O… ¡Cuidado con las sorpresas! ¡Que las elecciones las puede cargar el diablo y…! Ja, ja, ja… Se llama Julio Comendador y quiere ser alcalde de Toledo. Por eso se presenta a las elecciones del 24 de mayo y encabezará la candidatura de la Unión de Ciudadanos Independientes (UCIN). Y así, a modo de aperitivo, para que sepan algo más de él, es ingeniero de Caminos, Canales y Puertos y actualmente trabaja en el Ministerio de Defensa. ¡Ozú!
La primera pregunta de la Entrevista Irreverente que le hemos hecho en encastillalamancha.es, de la que están leyendo un adelanto y que, completa, publicaremos mañana viernes, era obvia: Oiga, y usted… Cuando comentó que iba a ser candidato a la Alcaldía de Toledo nadie le dijo… ¡¡¡Venga Julio, estás de cachondeo!!!
Y Julio, deportividad ante todo, nos cuenta que… «Sí, algunos me han dicho que dónde voy, pero yo…». Pues que… «Esto no lo hago porque me aburra, siempre he sido muy activo y ahora la vida de casado me da más tranquilidad y estabilidad, ya no estoy de picos pardos…».
Ja, ja, ja… Ahí lo dejamos… ¡De momento!
Tiene 30 años y se afilió a UCIN ¡el sábado pasado! Antes había probado en Ciudadanos, pero «vi que no hay democracia interna, por lo que entré en UCIN, donde entré como un ciudadano normal, como un demócrata, donde voy a intentar hacer un equipo».
Dice que no se conformar con conseguir solo un concejal, pero que ya se verá. Y que en las últimas elecciones municipales, autonómicas y generales votó a… Pues nos lo ha contado y mañana se lo diremos.
Atención a lo primero que haría en el caso de ser elegido alcalde: ¡cargarse a todos los asesores del Gabinete de la Alcaldía! ¿Razón? «Porque he echado cuentas y de ahí se pueden sacar 400.000 ó 500.000 euros solo en personal de confianza». ¡Átense los machos algunos!
Por lo demás, que sepan que su primer amor fue a los 15 años en el campamento de la parroquia, que sobre matar a Bin Laden llega a la conclusión de que «¡si hay que matar, se mata!» aunque con algunos peros que ya les explicaremos; que en un viaje de Los Ángeles a Moscú le tocó en el asiento de al lado a una mujer que a base de pedir vinos y más vinos se cogió una melopea de aquí te espero y…
¡Vaya espectáculo!
¡Y que llegó a trabajar de azafato y en ocasiones llegó a sentirse casi prostituido! ¿Pero esto qué essssss? «Estás ahí, como un florero, se te engancha una mujer y…».
¡Madre mía!
Todavía recuerda la primera vez que hizo el amor, pero… Mejor se lo contamos mañana.