La toledana plaza de Zocodover acogió en la tarde del viernes una besada organizada por la Asociación LGTB Bolo-Bolo, con motivo del Día de la Paz y la No Violencia. El objetivo, “mostrar el rechazo a la LGTBfobia, es decir, a la discriminación, el odio y la violencia que a día de hoy siguen sufriendo las personas con motivo de su orientación sexual o su identidad de género”, como informa esta asociación en una nota de prensa.
Durante la concentración, la presidenta de Bolo-Bolo, Elena Arroyo, leyó el manifiesto #BesosContraLaViolencia, acompañada de Diego Ferro, del área de Juventud. “Con admiración y cariño, a todos aquellos hombres y mujeres que en algún momento de su vida supieron decir sí a sus sentimientos, a su corazón, y a decir no a la opresión y el silencio”, expresó Arroyo.
Además, la presidenta de Bolo-Bolo quiso recordar los casos de homofobia que se han sufrido en Toledo en los últimos meses, donde parejas del mismo sexo han sido expulsados de diversos establecimientos debido a su orientación sexual. “Un gesto de amor, un beso o una caricia siguen siendo motivo de agresiones, burlas, insultos y vejaciones”, dijo.