Felipe Pulido, en la imagen, se prepara para ir una semana como periodista de guerra al Líbano.
«CUANDO MI VOZ CALLE CON LA MUERTE, MI CORAZÓN TE SEGUIRÁ HABLANDO»
Cuando mi voz calle con la muerte, mi corazón te seguirá hablando.
«Con esta frase que nos queda del filósofo y escritor indio Rabindranath Tagore se podría resaltar la importancia del periodismo para el mundo. Aunque se coarte la libertad de expresión o se muera en el intento de contar los hechos, la pluma del periodista no cesará de escribir con el corazón para llegar a lo más profundo del ser humano y cambiar situaciones…».
Con estas palabras comenzaba el ensayo titulado «La pluma del periodista en el corazón del mundo», con el que Felipe Pulido Esteban, periodista recién licenciado y natural de Castillo de Bayuela (Toledo), consiguió ganar el primer premio al mejor ensayo en el curso «El reportero de guerra. Nexo entre la opinión pública y las FAS, en el contexto del conflicto», que organizaron el Ministerio de Defensa y la Universidad Complutense.
Y como premio, atención, «estaré durante una semana como periodista de guerra empotrado en las Fuerzas Armadas Españolas en el Líbano», tal y como ha contado el propio Pulido a encastillalamancha.es. Un certamen que surgió en 2014 tras la celebración de las III Jornadas de Reporteros de Guerra que tuvieron lugar a finales de 2013 en la Facultad de Ciencias de la Información, «un seminario que acercaba a los estudiantes al reporterismo bélico y al trabajo que los profesionales de la información desempeñan en el frente».
Leamos algo más del ensayo premiado…
«El periodista tiene en su mano el poder de resolver conflictos y ayudar a denunciar lo trágico que en ellos sucede. Como un soldado más, el reportero podrá saltar al campo de batalla y luchar con sus armas para contribuir a devolver la paz. El reportero de guerra demuestra, de esta forma, un compromiso con la sociedad…».
EL PREMIO SE LO ENTREGAN EL VIERNES 6, Y EL 17 DE FEBRERO SALDRÁ PARA EL LÍBANO
El galardón se lo entregarán hoy, viernes 6, en un acto que se celebrará en el Ministerio de Defensa, y apenas 10 días después, el 17 (a lo sumo, el 24), saldrá para el Líbano junto a otras dos jóvenes premiadas, Irene Casado y Odei Cacho. Allí estarán una semana conociendo, en vivo y en directo, cómo es el reporterismo de guerra, junto a los integrantes de las Fuerzas Armadas Españolas destinadas en el lugar.
En total se presentaron unos 50 ensayos, de los que se eligieron los tres ganadores, entre ellos el de Felipe, quien en la actualidad está realizando un Master en Periodismo Multimedia Profesional en la Universidad Complutense y que en su corta vida ha ganado también dos premios de poesía y es miembro del Consejo de Gobierno de la Complutense.
Sigamos con el ensayo ganador…
«Para el periodista y, más aún si cabe, para el reportero de guerra, la relación con los seres humanos es un elemento indispensable. Para ejercer el periodismo hay que ser buenos seres humanos. Ante las situaciones de lucha, de rebeldía, ante los oprimidos, ante los que sufren la explotación o la marginación es necesaria la pluma del periodista. Esa gente necesita que alguien hable por ellos, que alguien denuncie la aterradora situación en la que viven…».
«CUANDO MI VOZ CALLE CON LA MUERTE, MI CORAZÓN TE SEGUIRÁ HABLANDO»
Ensayo que terminaba de la siguiente forma…
«Un fragmento de un poema de Calderón de la Barca decía: Que nadie espere que ser preferido pueda por la nobleza que hereda, sino por la que él adquiere. No hay duda de que el reportero de guerra, en contacto con las personas, adquiere el compromiso social. Eso le convierte y le otorga la mayor de las noblezas, pues ofrece su vida y su trabajo al mundo. Con ello obtiene un reconocimiento que, aunque no se pueda apreciar, en muchas ocasiones y con las gafas de cerca, le honra. Si la sangre, el tiempo o el dolor acabaron con su vida, jamás acabaron con su trabajo. Cuando mi voz calle con la muerte, mi corazón te seguirá hablando«.