El Gobierno de Castilla-La Mancha ha elevado el techo de gasto para 2025 un 4,5%, 354,6 millones, hasta los 8.315 millones de euros, una aprobación en Consejo de Gobierno que es paso necesario para la elaboración de los Presupuestos para el siguiente ejercicio, que el Ejecutivo autonómico pretenden que estén listos para entrar en vigor a 1 de enero.
El principal motivo del aumento del techo de gasto es el aumento de las entregas a cuenta por parte del Estado, cuyas cuentas ya fueron comunicadas por la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, a finales de julio a las comunidades autónomas, a pesar de que se tumbó el techo de gasto nacional por los votos en contra de PP, Vox y Junts en el Congreso.
Sobre la aprobación del techo de gasto en Castilla-La Mancha ha dado cuenta en rueda de prensa el consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso, Ruiz Molina, quien ha instado a que se apruebe el techo de gasto nacional, para saber si las comunidades podrán incurrir en el 0,1% de déficit sobre el PIB que prevé el Gobierno nacional.
Sobre el techo de gasto de la región, está previsto que Castilla-La Mancha reciba 7.257 millones de la financiación autonómica, a lo que habría que añadir lo que recauda la región en tributos propios, en torno a 1.200 millones, de los que 15 serán del canon del agua, que entrará en vigor el próximo año por primera vez.
Buenas perspectivas económicas
Ruiz Molina ha destacado que es un techo de gasto para poder hacer frente a los «compromisos alcanzados con la ciudadanía», todo ello en un buen contexto económico, donde tanto las previsiones de crecimiento tanto de la economía en general como del empleo en particular son positivas.
Así, el Gobierno prevé que la región crezca un 2,3 este 2024 y un 2% en 2025, una estimación «prudente», por debajo de lo que estiman otros organismos.
También ha destacado que en los últimos años Castilla-La Mancha es la tercera comunidad autónoma que más ha reducido su deuda con respecto al PIB, «una reducción que estamos haciendo compatible, con la congelación de la presión fiscal y haciéndola compatible con el pago a los proveedores en el menor tiempo posible, 11 días por debajo de la media nacional», ha subrayado.
Así, el consejero ha resumido este paso dado por el Gobierno regional como «un techo de gasto que nos va a permitir incentivar la actividad económica y el crecimiento del empleo, siempre con la patronal y los sindicatos, así como acometer la lucha contra la despoblación, y avanzar con la transición ecológica y la digitalización».