La nieve y el hielo de los últimos días en Cuenca han formado carámbanos de hasta medio metro en numerosas cornisas de la ciudad, que han obligado a los bomberos a trabajar en su retirada durante dos días y al Consistorio conquense a pedir a los ciudadanos que extremen la precaución.
Según han informado a Efe fuentes del parque municipal de bomberos de Cuenca, las primeras salidas por llamadas de ciudadanos se produjeron el jueves, la segunda jornada de nieve, hielo y bajas temperaturas que ha sufrido la capital esta semana.
El viernes, los trabajos se han centrado por la mañana en retirar las formaciones de hielo, «de hasta seis o siete centímetros de diámetro» de algunas viviendas de la calle San Pedro, una estrecha y oscura vía que es el principal acceso al barrio del Castillo, en la parte alta del casco antiguo de la ciudad.
La zona ha tenido que ser cortada al tráfico para que los bomberos pudieran desplegar la escala con la que retirar, a mano o con una pértiga, los carámbanos, aunque en algunas zonas ha sido bastante complicado.
Por la mañana también se ha actuado en las inmediaciones del colegio «Las Benitas», en la parte histórica de Cuenca.
Los trabajos, en los que han participado tres conductores, un bombero y un cabo, se han centrado esta tarde en el camino Cañete, una vía con aceras estrechas muy transitada en la que cerca hay un colegio y un instituto.
La ciudad se recupera poco a poco de tres jornadas invernales, aunque sigue quedando nieve acumulada en cales y sobre todo aceras y parques.
Las dos rutas turísticas, que han estado cerradas de manera intermitente, ya están abiertas al tráfico y el transporte urbano funciona con normalidad, según la página web del Consistorio.