domingo, 29 de septiembre de 2024
Entrevista Irreverente a Rubén F. Paz, secretario general estatal y regional de los agentes medioambientales de UGT 13/03/2015junio 8th, 2017

Te le encuentras por el monte y… ¡Mejor salir corriendo! Ja, ja, ja… Ahí le tienen, a sus 39 añazos, gallego de Santiago de Compostela pero que a los tres años ya estaba en Cuenca, que fue donde dieron plaza a su padre médico. Allí hasta los 17, «cuando me dediqué a recorrer España y el mundo, bien en campamentos de verano o con los jóvenes ecologistas por Castilla-La Mancha. Me iba con la mochila y…».
No es tan fiero el agente medioambiental como le pintan, no… Secretario general estatal y regional de los agentes medioambientales de la FSP-UGT, Rubén F. Paz jugó, como no podía ser de otra forma y en sus años mozos, al rugby, «un deporte de villanos que lo juegan caballeros, mientras que el fútbol es un deporte de caballeros que lo juegan villanos». Que es su gran afición, «también me encanta el fútbol americano».
De ese deporte de villanos guarda gratos recuerdos, «nunca verás a un jugador de rubgy protestar al señor, ¡Es que no es el árbitro, es el señor! Mi equipo se llamaba ‘A palos’, porque tirábamos entre los tres palos, ja, ja, ja… Y recuerdo que el peor insulto que te podían decir era: ¡futbolero!». Y ojo, que durante los años que lo practicó se rompió una tibia, un peroné, los ligamentos, la cara, el brazo… Pare, pare, pare…
Estudió Hostelería, luego Trabajo Social y más tarde se hizo agente forestal, «conocí a mi pareja actual, tuvimos dos niñas mellizas, en 2004 nos fuimos a la zona del Alto Tajo, en Guadalajara, donde entré a trabajar como agente, y en 2009 me fui a Fuencaliente (Ciudad Real). Aunque vivo en Cardeña (Córdoba), a apenas 15 kilómetros de donde trabajo, en Fuencaliente».
Por eso en las próximas elecciones votará en… ¡Andalucía! «Y voy a votar al PSOE, sí, sí, sí…». No está liberado sindicalmente y su día a día transcurre de la siguiente forma: «Salgo de trabajar, un rato con la familia, enganchar el Twitter, enganchar el Facebook, mandar correos, atender el teléfono de todos los compañeros, hay que dormir…».
¡Y es que la cabra tira al monte!

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Cuénteme eso de las reuniones maratonianas que tienen los agentes medioambientales con la administración… Que incluso alguna empezó a las 10 de la mañana y terminó… ¡¡¡A las 3 de la madrugada!!!

Una vez sí. Los representantes de los trabajadores, en este caso de los agentes medioambientales, venimos a Toledo para intentar defender nuestros intereses, y hasta que no entendemos que están plenamente defendidos, pues no paramos. Siempre y cuando la administración nos dé tiempo y potestad. Pero que una reunión sea maratoniana no garantiza que tengan resultados. De hecho, en tres años y medio no hemos tenido ningún resultado.

¡Ni uno!

Ni uno.

Todas las reuniones que han tenido en tres años y medio han resultado inútiles…

No, no han resultado inútiles, han resultado perjudiciales para el colectivo. Porque inútil es algo que no vale para nada, perjudicial… Siempre han sido recortes de derechos, de competencias, de sistema, de vehículos, recortes, recortes, recortes…

¿Qué les dicen, que no hay dinero?

Que no hay capacidad. Y muchas veces también nos echan la culpa porque dicen que estamos muy ideologizados.

Eso qué significa, ¿que son de izquierdas?

Se supone.

Con la reforma de la Ley de Montes… ¿Les quieren dar por todos los lados?

Ja, ja, ja… La Ley de Montes de 2006 fue una gran evolución y un gran avance. Ahora, pues… Habrá que preguntarles a ellos, porque nosotros ya estamos cansados de decirlo. Lo primero que me pregunto es… Porque hasta que con la ley del aborto, aunque yo pueda no estar de acuerdo con ella, había una demanda social de una parte de la sociedad, estamos en democracia y cada uno piensa lo que quiere, pero con la Ley de Montes no hay una demanda social. No sé con quién se han reunido en el Ministerio, pero sí me lo puedo imaginar. Se han reunido con grandes terratenientes de caza, con grandes terratenientes sin ser de caza y de nada, con empresas madereras y con constructores. O con especuladores. Lo más grave es la recalificación de los terrenos incendiados.

¿Por qué?

Vamos a suponer que todos somos buenos y mañana decidimos que hay que construir un hospital. Y tenemos un terreno incendiado y decimos que mejor que usar otro terreno, pues utilizamos ése porque es de interés público. Urbanizamos y construimos el hospital. ¿Alguien me quiere convencer que 15 años después, en los terrenos colindantes a ese hospital, no se van a construir pisos? ¡Eso es mentira! ¿Qué interés hay en recalificar eso? Económico. ¿Qué interés hay en que los agentes medioambientales pasen a ser auxiliares de la Guardia Civil y pierdan competencias en investigación de delitos ambientales? Que se investiguen menos delitos ambientales. Y así habrá menos culpables y será más fácil recalificar los terrenos. Al final es un círculo. A nosotros nos quitan el carácter de funcionario, que es mucho más grave que nos conviertan en auxiliares.

¿Usted es cazador?

Lo he sido.

¿Qué cazaba?

No es que lo haya sido, nunca he participado en una montería. Yo he hecho de acompañante y no estoy especialmente en contra de la caza. ¿Qué cacé? Pues un jabalí.

Y con la nueva Ley de Caza de Castilla-La Mancha, ¿los cazadores se convierten en señoritos? ¿O la caza es solamente para los señoritos?

Es que… Vamos  ver. La caza es una actividad cultural y además, ahora, necesaria en ciertos casos. Necesaria en los grandes mamíferos, porque como nos hemos cargado a los lobos, a los grandes depredadores, hacen falta… La desgracia es que como no tenemos depredadores naturales pues tenemos que hacer depredadores artificiales porque lo cierto es que hay que controlar el exceso de reses porque si no pueden sobrevenir ciertas epidemias. O malformaciones genéticas por endogamias. Pero que si yo quiero hacer una ley de caza popular, lo primero es que no le hago pagar todos los años la licencia a los jubilados. Que antes no la pagaban y ahora tienen que pagarla. Todos los años. O no quito toda las zonas cinegéticas comunes.

Entonces, ¿la caza va a ser para señoritos?

La caza mayor, sí. Y las cazas intensivas.

Por lo tanto, ¿sigue habiendo señoritos?

¿En qué mundo vives? ¡Claro que hay señoritos! Hombre, en una cacería yo he escuchado decir que ya estaba bien que se juntaran los ricos con los pobres. Que los pobres tienen su sitio en las monterías, que es ser postor, perrero o secretario y que ellos tenían su función, que era cazar.

¿Eso lo ha escuchado hace mucho tiempo?

Empezando la crisis.

Pero eso parece más un diálogo sacado de la película «Los santos inocentes»…

Ehhhhhhh… Pero es que España es muy cañí todavía.

¿Cuál es el animal que más le gusta?

Ja, ja, ja… Son muchos, pero doméstico, el perro. ¿No doméstico? Las aves, las águilas me parecen impresionantes.

¿Es usted más de campo que las amapolas?

Lo he sido. Ahora la verdad es que con las circunstancias de representación y demás me he tenido que tecnificar bastante. Ya no lo disfruto tanto como antes. Porque antes, si veías en el campo a alguien haciendo el cabrón, hablando mal y pronto, pues se lo decías… Pero ahora ya se te pone la mala leche de decir… ¡Coño, es que si estuviera de uniforme, pues ese tío o esa tía se iba a enterar de lo que vale un peine porque lo que está haciendo es una salvajada!

¿A qué se refiere cuando dice que ha visto a alguien haciendo el cabrón en el campo?

Pues liarse a pegar hachazos a un árbol porque le apetece y no tiene nada mejor que hacer, jugar a la diana con los árboles, rayar los árboles, prender fuego debajo de las barbacoas porque les apetece, dejar las bolsas de basura colgadas en los pinos y al lado de los caminos porque se piensan que hay algún servicio de basuras que pasa a recogerla por mitad del monte, pasar con los coches o las motos a toda pastilla al lado de un área recreativa, ponerse con el chunda, chunda, chunda a todo trapo en mitad de un parque natural porque está solico y como el monte es de todos pues él usa su parte aunque esté mal usada… ¡Hacer el cabrón!

¿Lo más curioso que ha visto?

Pues unos señores que se pensaban que… Ja, ja, ja… Hay una especie de pino que tiene color asalmonado por arriba, por la zona de la sierra alta de Cuenca, de Guadalajara… Me llamaron la atención como agente medioambiental y me preguntaron si allí había muchas ardillas. Les dije que sí. Y le decía el uno al otro: Ves, ves, ves… ¿Y comen por aquí? Pues sí. ¿Y les hacen algo más a los árboles? Por ejemplo, eso que tienen los árboles en la parte de arriba, de un color diferente, eso es de rascar las ardillas, ¿no? Y les tuve que explicar que no, que era un tipo de árbol que era así. Ja, ja, ja… ¡La imaginación es libre!

¿Ha visto «hacer guarrerías» en el campo?

¿Sexo? Sí, hombre, claro.

Y en esos casos, ¿qué hace un agente medioambiental: los deja, los da un toque…?

Nada, ¡qué vas a hacer! Como mucho, en el supuesto de que estuvieran haciendo algo en una zona pública y demás, pues… No se me ha dado el caso. Sí de gente por el campo y… Pues ellos a su marcha y nosotros a la nuestra.

¿Hay personas más animales que los propios animales?

Hay personas más salvajes que los animales.

¿Por qué nos estamos cargando a los lobos?

Porque es mucho más fácil matarlos y tener el ganado suelto sin vigilar y sin perros que controlar el ganado.

Los lobos y el ganado, cada uno en su lugar, ¿son compatibles?

Y todos juntos. La administración lo que tiene que poner son medidas. Igual que las han puesto para arreglar los cotos en Castilla-La Mancha y les han dado 20.000 euros por coto a los señoritos, pues se les pueden dar 20.000 euros o más por ganadero como ayudas si hay un ataque. Aunque hay otros sistemas coercitivos, que ayude la administración a tener una raza de mastín que no se acercaran por ahí los lobos, que fomenten unos sueldos coherentes para los pastores para que no dejen el ganado suelto por las noches…

El lobo no es un enemigo…

El lobo no es un asesino. Ni el oso, ni el zorro… ¡Si hay algún enemigo de todos ellos es el ser humano!

Si tuviera frente a usted a los miembros de UGT que se aprovecharon de las tarjetas black de Bankia, ¿qué les diría?

Les miraría.

¿Con eso valdría? Porque con una mirada suya…

Les miraría hasta que les diera vergüenza. Pero vamos, al resto y a ellos. Pero a unos defensores de los trabajadores… ¡Lo primero es que no sé qué coño pinta un sindicalista o expresidentes socialistas en un comité de…! ¡Esos son socios-listos! Siempre he dicho que hay, fuera del partido, porque yo también soy del partido (PSOE), hay socialistas y socios y socias-listas! Y en este país hemos pecado de tener muchos socios-listos.

¿Cuál es su gran ilusión ahora mismo?

Tener tiempo y escribir un libro que se llamaría «Por 15 kilómetros». Porque… ¿Por qué por 15 kilómetros mis hijas tienen el dentista gratis o no hasta los 16 años? ¿Por qué por 15 kilómetros tienen los libros gratis o no? ¿Por qué por 15 kilómetros tienen pizarras electrónicas o no? Dependiendo de si estás en Andalucía o en Castilla-La Mancha. En Andalucía sí y en Castilla-La Mancha no. ¡Por 15 kilómetros dentro de un país, ¿eh?!

¿Quién fue su primer amor y a qué edad?

Una compañera de clase a los 13 ó 14 años, en Primero de BUP. Amaya.

¿Quién le ha dado calabazas amorosas?

No, es que siempre he sido de parejas siempre largas, no…

¿Usted hubiera dado la orden de matar a Bin Laden?

Yo no doy la orden de matar a nadie.

¿Alguna fobia confesable?

A la intolerancia en todos los sentidos. De la derecha, de la izquierda…

¿Es partidario de que las parejas de homosexuales adopten niños?

Sí.

¿Alguna anécdota en los viajes que ha hecho?

Muchas, pero la más curiosa… En un viaje organizado, cuando trabajaba de director de actividades, se repartieron por la noche las habitaciones. Y por la mañana se liaron a llamarme padres y tuve que recorrerme el hotel entero porque ninguno estaba en la habitación que les había… Tengo que decir que todos los chicos y las chicas eran mayores de edad. Ja, ja, ja… ¡Pero ninguno estaba en la habitación que le tocaba! Eran 50, lo que pasa es que la Junta lo hizo muy bien y puso 25 chicos y 25 chicas, aquello fue… ¡Memorable! Fue en Túnez.

Y la noche siguiente, ¿qué pasó?

Les dije que se pusieran en la habitación que estaban porque lo único que quería era avisarles por si surgía una emergencia o llamaba algún padre, para saber dónde estaban. ¡Porque ya te digo que eran mayores de edad!

¿Algo desconocido de Rubén F. Paz que nos sorprendería?

Ehhhhhhhh… Bueno, ahora no sé, antes… Yo solo tengo un problema, y es que cuando no comprendo algo… No digo compartirlo o no compartirlo, sino comprenderlo. Por ejemplo, lo de la Ley de Montes no lo comprendo. Pues me quita el sueño.

Sea sincero, ¿qué piensa de los periodistas?

Que hay que darles de comer bien. Porque por la boca muere el pez.

Pero habrá como en todas las profesiones, ¿no? Los habrá buenos, malos…

Pero esto no tiene nada que ver con que sea bueno o malo el periodista. Hay que tenerlo contento, porque si no lo tienes contento pues no te entrevista.

¿Cuál fue su primer sueldo?

5.000 pesetas por rellenar sobres de publicidad electoral en Cuenca. Creo que fue de UCD. Con una empresa que me llamó.

¿Alguna vez ha cobrado en B?

Sí. Trabajando por la noche en un pub, de camarero.

¿Tiene algún tatuaje o piercing?

No.

En caso de necesidad, ¿qué estaría dispuesto a hacer? Uno, robar para comer; dos, prostituirse para comer; o tres, engañar a Hacienda.

Engañar a Hacienda lo tengo complicado aunque quiera, porque los que estamos con sueldo tasado… Prostituirme a lo mejor sí, ¡pero me parece que iba a ganar poco!, ja, ja, ja…

¿Le gusta bailar?

No, me siento muy ridículo.

Y en el caso de que le gustara, ¿con quién le gustaría echarse un bailecito?

Ahora mismo, con la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Para decirle unas pocas cosas al oído. Un baile agarrado, sí.

¿Pena de muerte sí o no?

Noooooo…

¿Ha robado algo?

Sí. Tuve una etapa un poco complicada, pero…

En estos momentos ve que mi cara es poco menos que un poema y…

¡No, no, no… A grandes superficies siempre! Era un niño y quizás robé un bollicao o algo así. ¡De mayor no!

Y a usted, ¿le han robado alguna vez?

Sí. Teléfonos móviles, dinero, me han puesto una navaja al cuello para quitarme dinero…

Pues para ponerle una navaja al cuello a usted, que es un tocho, hay que tener…

No, no… Tendría yo 10 años o así. Venía de comprar unos pasteles en Cuenca, a principios de los años 80, cuando estaba toda la movida de la heroína… Era una época chunga. Me pusieron una navaja. Y una jeringuilla también. Me dijeron que me pinchaban si no les daba lo que llevaba. ¡Para quitarme cinco duros, ya ves!

¿Quién es la famosa que más le atrae físicamente?

Rita Hayworth. Por su pelo pelirrojo y por…

¡Y porque era un pibón!

Sí.

¿Qué nos puede contar de la primera vez que hizo el amor?

¡Que no es follar!

Cada uno lo interpreta como quiere…

Bonito. Bonito porque no fue la primera vez que practicaba sexo. ¡Es que no es lo mismo follar que hacer el amor! Fue bonito, tierno, cariñoso, con una persona que ya llevaba tiempo… ¡Bien!

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