Los propietarios del Aeropuerto Internacional de Ciudad Real han defendido que, toda vez que se trata de un aeródromo internacional, «puede dar acogida temporal a migrantes», por lo que ha lamentado la reacción «desmedida» a su juicio de la Junta de Castilla-La Mancha ante la posibilidad de instalar un centro de acogida.
En un comunicado de prensa hecho público este jueves, la empresa Ciudad Real International Airport (CRIA) ha lamentado que el Ejecutivo regional ha olvidado que «es un aeropuerto internacional, que al igual que el aeropuerto de Madrid Barajas Adolfo Suarez, puede dar acogida temporal a migrantes por vía aérea, pero en condiciones más humanitarias».
En este sentido, han apuntado que al contrario de lo que el Gobierno de Castilla-La Mancha plantea para el Aeropuerto de Ciudad Real, el Gobierno de la Comunidad de Madrid «no se tiene noticia de que haya levantado actas de infracción al aeropuerto, ni lo haya advertido con retirarle las licencias».
Así, ha argumentado que el régimen legal a que se encuentra sometido el Aeropuerto de Madrid Barajas-Adolfo Suarez es el mismo al que se encuentra sometido el Aeropuerto Internacional de Ciudad Real, y ha señalado que en España, las salas de acogida de migrantes en los aeropuertos están bajo la competencia del Ministerio del Interior, específicamente a través de la Secretaría de Estado de Seguridad.
En este punto, ha indicado que las salas de protección internacional destinadas a la acogida de migrantes solicitantes de asilo del Aeropuerto de Madrid Barajas-Adolfo Suárez exceden su capacidad real y a día de hoy albergan más de 390 personas en condiciones que «están al límite de las que se podrían calificar como totalmente dignas y humanas».
También han advertido de que la Ley reguladora del derecho de asilo y de la protección subsidiaria, así como el Real Decreto por el que se aprueba el reglamento que regula el sistema de acogida en materia de protección internacional, reconoce a las personas solicitantes de protección internacional, cuando carezcan de recursos económicos (personas vulnerables), así como el derecho a acceder a los servicios sociales y de acogida necesarios para asegurar la satisfacción de sus necesidades básicas en condiciones de dignidad.
Asimismo, insisten en su comunicado, prevé la posibilidad de extender estas prestaciones a personas a las que se hubiera reconocido el Estatuto de Refugiado o la protección subsidiaria en aquellos casos en que circunstancias especiales así lo requieran.
La evaluación del Aeropuerto de Ciudad Real, a iniciativa del Gobierno central
En este contexto, los propietarios del aeropuerto de Ciudad Real han señalado que ha sido la Administración central, por su propia iniciativa, la que ha mantenido «contactos con el Aeropuerto Internacional de Ciudad Real, sin que hoy en día exista ningún acuerdo del que pueda informarse al Gobierno de Castilla-La Mancha».
CRIA ha recordado que los técnicos de la Administración central están evaluando las diferentes alternativas, y al final de su trabajo darán su opinión acerca de cuáles son las alternativas que a su juicio reúnen las suficientes condiciones para ser consideradas idóneas.
Los propietarios del Aeropuerto Internacional de Ciudad Real han asegurado que quieren hacer pública esta reflexión, «con todo el respeto posible y sin ánimo de polémica», para «desmentir las imputaciones» que «se están realizando desde el Gobierno de Castilla-La Mancha«.
De hecho, ha defendido que en el Aeropuerto Internacional de Ciudad Real no se están construyendo barracones ni edificaciones «destinadas a encarcelar a los migrantes».
Para CRIA, la reubicación transitoria de los migrantes para «proporcionarles unas mínimas condiciones de higiene, alimentación y estancia», en tanto se regulariza su situación, en un sentido u otro «es un problema que exige soluciones inmediatas».
Ha subrayado que «si se tratara de personas de raza blanca, por ejemplo, ucranianos rubios y con ojos azules», los inmigrantes serían acogidos en casas; «si se tratara de personas de raza negra, que meten tres goles y salvan un partido de fútbol que se estaba perdiendo, serían fichados por equipos de fútbol».
Pero ha lamentado que «cuando se trata de personas de raza negra o de cualquiera otra, vulnerables, que han llegado en pateras, cualquier pretexto sirve para desentenderse del problema».
También ha considerado necesario trabajar en programas de integración, pero ha advertido de que «con carácter previo e inmediato hay que dar una solución a su reubicación temporal, salvo que se opte por abandonarlos en condiciones inhumanas».