El Consorcio de Toledo rehabilitará y gestionará el edificio de Alamillos del Tránsito, propiedad de la Diputación provincial, para generar en el casco histórico viviendas y nuevas plazas de aparcamiento para residentes, además de una nueva plaza vinculada al agua, un mirador y una pasarela con la plaza del Conde.
Según ha informado la Agencia Efe, la actuación en el edificio de Alamillos del Tránsito se enmarca en el proyecto ‘Toledo Emerge‘, para cuya puesta en marcha el alcalde de la ciudad, Carlos Velázquez, y la presidenta de la Diputación, Concepción Cedillo, han firmado este martes un protocolo de intenciones para escenificar la colaboración entre ambas administraciones.
Tras la rúbrica, Cedillo ha señalado que «comienza a emerger Toledo» con un proyecto que llevará a la ciudad a una «profunda transformación» y recuperará cinco edificios e inmuebles abandonados en el casco, cuatro de ellos de titularidad de la institución provincial.
Edificios, ha resaltado, que estaban en desuso y que se destinarán a la cultura, el ocio, la vivienda para jóvenes y la restauración, al tiempo que generarán nuevos espacios para toledanos y visitantes.
De esta manera, la Diputación, aunque conservará su propiedad, cederá al Ayuntamiento para la actuación correspondiente un edificio en Abdón de Paz, otro en San Juan de Dios, el antiguo cementerio de las monjas y el edificio de Alamillos del Tránsito.
Ejemplo de cómo actuar en el patrimonio
Por su parte, Velázquez ha coincidido en que el proyecto ‘Toledo Emerge’ es «transformador» y ha subrayado que supone «un ejemplo para el resto de ciudades con patrimonio abandonado, dentro y fuera de España», a la vez que «marca el camino sobre qué y cómo se tiene que hacer para recuperar patrimonio abandonado y darle uso».
A su juicio, este proyecto se debería y se podría haber hecho antes, ya que se trata de cinco edificios que ocupan muchos metros cuadrados en el Casco Histórico y algunos de ellos llevan más de 50 años abandonados e incluso se convierten en focos de peligrosidad para las personas.
Además del edificio de Alamillos del Tránsito, Velázquez ha indicado que hay dos proyectos en los que se contará con colaboración público-privada como son el del antiguo cementerio de las monjas, que se convertirá en un centro de interpretación gastronómica de la provincia de Toledo, y el edificio de San Juan de Dios, que se destinará a un espacio hotelero y permitirá también ampliar la plaza de Barrio Nuevo, generar un nuevo eje peatonal y locales para la artesanía toledana.
A las tres iniciativas anteriores se suman el edificio de Abdón de Paz, cuyo fin es que acoja un museo vivo de expresiones culturales de los pueblos toledanos y de la capital, con espacios para la formación y la creación; y el antiguo edificio de RNE, que es de titularidad del Ayuntamiento y donde está previsto un centro de mayores, con la colaboración de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Preguntado por plazos y presupuesto para estos proyectos, Velázquez ha dicho que el protocolo firmado este martes con la Diputación no incluye un horizonte temporal pero que ya están dando los primeros pasos en algunos edificios.
Con todo, ha incidido en que ‘Toledo Emerge’ es un proyecto «sostenible y viable económicamente» porque en dos de los edificios se actuará con colaboración público-privada, lo que permitirá recuperar parte de la inversión.