La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, informaba hoy martes de que la Consejería presentará una guía de apoyo a todos los ayuntamientos para explicarles en qué consiste el impuesto de vertidos y la tasa de residuos, «dos elementos de fiscalización que se usan para desincentivar la creación indiscriminada de volúmenes de residuos que no se valorizan porque no se hace una separación adecuada de los mismos».
Impuesto de vertidos y tasa de residuos
Los ayuntamientos tienen de plazo hasta abril de 2025 «para contemplar dicha fiscalidad en sus ordenanzas municipales», dijo la consejera, quien aseguró que el Gobierno regional les ayudará en esta implementación.
Los ayuntamientos deben tener en cuenta una de las directivas europeas, según la cual, «quien contamina, paga». «Estas tasas existen para evitar que se generen estos residuos, y si se generan, ser capaces de separarlos adecuadamente en la cadena de valorización, a fin de contribuir a la protección del medio ambiente», precisó Mercedes Gómez.
Por una fiscalidad progresiva
«Es importante apoyar a los municipios con esta nueva fiscalidad, teniendo en cuenta que el impuesto de vertidos es 40 euros por tonelada lo que tienen que abonar los consistorios de acuerdo a la ley 7/2022 del Gobierno de España; también deben ser capaces de que la tasa de basuras contemple un desglose de los gastos reales de la recogida, algo fundamental a fin de hacer una fiscalidad progresiva para quien más contamine», ha añadido la consejera.
«Quien más residuos genere, deberá tener una tasa mayor, y viceversa, aparte de las bonificaciones de los ayuntamientos para atender a las personas más desfavorecidas, lo que tiene ser contemplado en las ordenanzas», subrayó.
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