El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ha alabado el trabajo que se lleva a cabo en la Jefatura Superior de Policía de la región, donde los índices de criminalidad están por debajo de la media nacional y con tendencia a la baja. Así lo ha dicho Cosidó tras mantener el primer encuentro institucional con el delegado del Gobierno en la comunidad, Jesús Labrador, que ha considerado «un verdadero honor» contar con la visita del director general, quien está haciendo una ronda por las diferentes jefaturas de la Policía a fin de conocer los principales problemas de seguridad que tienen en cada comunidad.
«La jefatura superior de Policía de Castilla-La Mancha es una jefatura que funciona bien, con buenos índices de criminalidad y donde se trabaja para reducir, incluso, esos índices», ha dicho Cosidó. Por tanto, ha insistido en que tiene una «buena valoración» del trabajo que se viene desempeñando tanto por parte del jefe superior como por parte de todos los componentes de la plantilla.
El director general de la Policía ha aprovechado la conmemoración hoy del Día Internacional de la Mujer Trabajadora para rendir tributo a las mujeres que prestan servicio en el Cuerpo, 137 dependientes de la Jefatura de Castilla-La Mancha.
Tras ser recibido por el delegado del Gobierno, Cosidó ha visitado la Jefatura Superior de Policía, donde prestan servicio actualmente 1.521 agentes de todas las escalas y categorías, lo que supone casi un 90 por 100 de ocupación de las plazas de puestos de catálogo establecidos, por encima de la media nacional.
Del total de efectivos, 137 son mujeres, es decir, un 9 por 100, según ha informado la Policía Nacional, que ha precisado que desde 2004 hasta febrero de 2012, la plantilla de la jefatura en la región se ha incrementado en un 37,27 por 100, con 413 efectivos más.
Cosidó ha explicado también que aunque el delegado del Gobierno le ha informado de cuáles son las principales necesidades en materia de seguridad, se va de Toledo con una sensación e impresión de «absoluta normalidad y de absoluta confianza del delegado del Gobierno en la Policía y de reconocimiento de ese buen trabajo».
Lo único que le ha planteado Labrador -ha dicho el director general de la Policía- es la necesidad, en algunas ocasiones, de disponer del apoyo de las Unidades de Intervención de Madrid.
Por su parte, el delegado del Gobierno ha explicado que aunque los índices de delincuencia en la comunidad son inferiores a la media nacional, «nunca se está contento del todo, pues siempre hay margen para mejorar, ha indicado Labrador.
Jesús Labrador ha dicho también que el hecho de que haya visitado Toledo el director general del CNP es «un reflejo fiel de la voluntad del Gobierno de Rajoy de apostar decididamente por la seguridad de todos los ciudadanos de Castilla-La Mancha y de todos aquellos que quieren vivir en paz en nuestra nación».
En este sentido ha añadido que el Gobierno de España es un «convencido defensor de que la garantía de la libertad y el ejercicio de los derechos fundamentales se logran necesariamente con la seguridad, la protección y el ejercicio de los derechos de todos los ciudadanos».