Las elecciones andaluzas, laboratorio del 24 de mayo en el resto de España, han confirmado lo que apuntan las encuestas en España desde las elecciones europeas que tuvieron lugar hace algo menos de un año.
El bipartidismo en España está herido, aunque menos de lo que parecía, y Podemos y Ciudadanos son dos fuerzas que han llegado para quedarse más allá del europarlamento.
El PP se ha hundido en la comunidad más habitada de España solo tres años después de haber conseguido una victoria histórica y está obligado a hacer serias reflexiones no solo en Andalucía, porque Ciudadanos empieza a ser una amenaza muy seria, tanto como Podemos había demostrado serlo para el PSOE, aunque en Andalucía los socialistas les han dejado muy lejos de ser su alternativa.
Hoy los responsables de los partidos en cada lugar del país empezarán a analizar cada dato que ha salido de las urnas de Andalucía para tratar de proyectar lo que les espera el 24 de mayo en las 10 comunidades autónomas que celebran elecciones, así como el devenir de las municipales que habrá ese día en toda España y el de las generales a final de año.
Pese a que las encuestas auguraban al PSOE peores datos que en 2012, Andalucía demuestra que el huracán se aguanta mejor allí dónde hayan renovado y elegido un liderazgo fuerte, como es el caso de Andalucía con Susana Díaz, la máxima responsable del resultado. Los socialistas han pasado el examen con nota, recuperando la primera posición en su comunidad autónoma, hundiendo a su principal rival, el PP, y evitando la humillación con la que Podemos amenaza las expectativas socialistas en un montón de rincones de España. Además, Susana ha dejado a Podemos lejos de ser alternativa y se ha librado de la pesadilla que hubiera sido necesitarles para pactos de investidura. El reparto de escaños permite al PSOE otras soluciones.
Vamos, en el Partido Socialista, muchos colegas autonómicos de Susana Díaz se están mirando ahora en su espejo y suspirando un ¡quién pudiera! ¿Habrá peregrinaciones a San Telmo en busca de la receta?…
La consolidación de Ciudadanos fuera de Cataluña y precisamente en Andalucía, así como el serio revés de Izquierda Unida en una comunidad que les había sido muy proclive, son otras conclusiones que estaban en la mente de todos, por lo que apuntaban las encuestas y que se han confirmado con los votos.
Será curioso ver a los diferentes líderes regionales tranquilizando a la sociedad y sus filas públicamente, como si nada hubiera pasado, pero asustados hasta las trancas ante los escenarios hostiles e inciertos que se les avecinan.
El fin de ciclo que afecta al bipartidismo y empezó en las europeas se ha confirmado en Andalucía y parece que se va a seguir extendiendo por toda España, donde habrá parlamentos más plurales y se impondrán los pactos como forma de gobierno en algunos casos y otras, los gobiernos en minoría, una fórmula desconocida hasta ahora.
Si la tendencia marcada en Andalucía con los nuevos partidos no retrocede en los próximos meses, cosa que hoy parece improbable, tendremos que ir preparándonos en Castilla-La Mancha para un parlamento sin mayorías absolutas. Con los porcentajes de voto obtenidos por Podemos y Ciudadanos en Andalucía, ambas formaciones entrarían en las Cortes de CLM, con 4 o 5 escaños el partido de Pablo Iglesias y puede que con algún asiento el de Albert Rivera.
El resultado permitirá al PSOE gobernar en solitario, pero ¿cómo va a gestionar Andalucía y concretamente Susana Díaz el escenario de pactos decisión tras decisión, tan complicado porque los nuevos partidos no se quieren quemar a solo unos meses de autonómicas y generales?
De cómo se comporten los partidos en Andalucía las próximas semanas y meses se podrá también intuir cómo vendrán las cosas en las regiones y ciudades donde se den escenarios sin mayorías absolutas, que por lo que se intuye serán muchas a partir del 24 de mayo.