El Juzgado de lo Penal nº 1 de Albacete ha condenado a un paciente a 23 meses de prisión, con la agravante de reincidencia, por un delito de atentado al insultar y amenazar a un médico en su centro de salud, cuando pasaba consulta.
Los hechos juzgados prueban que el acusado se encontraba en la sala de espera del centro de salud de Hellín esperando a ser atendido cuando comenzó a gritar profiriendo expresiones tales como “que salga o lo voy a sacar de los pelos y le voy a dar dos hostias”, ante lo cual el facultativo salió de su consulta y, poniéndose más agresivo el acusado, se dirigió al médico con la mano en alto, haciendo ademán de golpearle en varias ocasiones, levantando el brazo, al tiempo que le decía “te voy a dar un puñetazo, gilipollas”, encarándose con el mismo y acercándose al mismo llegó a darle un leve toque en el hombro. A consecuencia de estos hechos el médico sufrió una crisis de ansiedad.
Fundamentos de Derecho
En los Fundamentos de Derecho, la sentencia recoge que el médico se sintió agredido, intimidado y tuvo miedo, sufriendo una crisis de ansiedad que le impidió ir a trabajar al día siguiente. Tal testimonio se ve corroborado por el prestado por los demás testigos que declararon en el acto del Juicio.
El Colegio de Médicos de Albacete manifiesta la importancia de que sus colegiados denuncien cualquier agresión en el entorno sanitario y se compromete a ofrecer apoyo jurídico en cada proceso. Esta institución defiende con firmeza una política de Tolerancia Cero frente a la violencia en los centros de salud, al tiempo que refuerza su postura de Stop Agresiones, haciendo hincapié en la necesidad de proteger y respetar a los profesionales que día a día velan por la salud de la ciudadanía.
“Desde el minuto cero acompañamos, amparamos, protegemos y ponemos a su disposición nuestra asesoría jurídica. Agredir a un médico es un delito penal”, ha destacado la Junta Directiva.