El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha exigido este sábado convocar en diciembre el Consejo de Política Fiscal y Financiera para «acordar entre todos el modo de reparto» de la recaudación del paquete fiscal aprobado esta semana por el Congreso.
En un discurso en la Casa de Cuenca en Barcelona, donde ha recibido el Premio ‘Quijote 2024’ de la Federación de Comunidades Originarias de Castilla-La Mancha en Cataluña, García-Page ha subrayado que también planteará «particularmente» ese asunto en la Conferencia de Presidentes de diciembre.
Y ha dejado claro que «la distribución de los nuevos impuestos» debe responder al modelo «legal» vigente, que es «multilateral y compartido», y no premiar «a los territorios que tienen más».
El Congreso aprobó el jueves, concretamente, la transposición de la directiva europea que regula un tipo mínimo del 15 % para las multinacionales y un paquete fiscal que incluye medidas como los impuestos a la banca y los vapeadores o una subida de la fiscalidad del tabaco.
«Si alguien lo que quiere es poner impuestos, por ejemplo, a los que todo el mundo sabemos que tienen más, los bancos (…), no será para entregárselo a los territorios que tienen más, porque entonces la lógica no la veo por ningún sitio, será para lo contrario, ¿no?», ha cuestionado García-Page.
Además ha abundado: «Si se quiere ir de ‘Robin Hood’ con los impuestos, obviamente eso se tiene que traducir en que se comparta de manera que nos vayamos cohesionando y podamos aspirar a tener todos las mismas prestaciones, los mismos servicios, los mismos derechos».
«No podemos estar ante permanentes cesiones y chantajes de pequeñas minorías, eso no es construir un país con sentido común», ha subrayado el presidente de Castilla-La Mancha, desde el principio una de las voces más críticas con la «financiación singular» catalana pactada por el PSC y ERC.
García-Page ha recalcado que «ninguna bandera puede amparar ningún tipo de privilegio» y ha censurado a quienes «quieren tener más que los demás siempre», lo cual «ni es razonable ni es de derecho».