Siempre es buen momento para visitar el Hayedo de Tejera Negra, pero es en la estación de otoño cuando más visitantes se acercan a contemplar la diversidad cromática de estos días del año. El color rojizo de las hayas se mezcla con los ocres y amarillos de robles y los verdes de los pinos, lo que provoca una explosión cromática que no deja indiferente al visitante.
El Hayedo de Tejera Negra se ubica en el municipio de Cantalojas, en 1974 fue declarado Sitio Natural de Interés Nacional y en 1978 Parque Natural. Actualmente se encuentra integrado dentro del Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara, declarado en el año 2011. El hayedo es, junto con los de Montejo de la Sierra (Madrid), Riofrío de Riaza (Segovia) y Puertos de Beceite (Tarragona), las manifestaciones más al sur de la península ibérica de este tipo de bosques. Algo extraño porque los hayedos son más característicos de las montañas húmedas situadas más al norte de estas latitudes.
Uno de los guías del Hayedo, Fernando Laguna nos explica que «su presencia en la zona centro de España se debe a que es un bosque relíctico, que se estableció en épocas anteriores en que el clima era más frío y húmedo que en la actualidad, y que se ha conservado en los valles más umbríos, donde la topografía favorece la formación de nieblas y mayores precipitaciones».
«400 hectáreas, muchas de ellas centenarias»
El paisaje que encontramos al llegar al Hayedo de Tejera Negra es un valle fluvial con vegetación de robledal y de pinar de pino silvestre procedente de repoblación, matorral de diversas especies y praderas junto al río. «Las hayas están localizadas en la parte más distante, al fondo del valle, tiene una extensión de 400 hectáreas, muchas de ellas centenarias», destaca Fernando.
Cada año recibe la visita de veinticinco mil personas que no se quieren perder esta explosión de colores, la mayoría de los visitantes son madrileños de diferentes municipios de la comunidad vecina, pero cada vez hay más turistas del resto de España que aprovechan esta época del año para recorrer la Sierra Norte de Guadalajara y rematar con el Hayedo.
Este paraje cuenta con una amplia variedad de hábitats, y por tanto, de especies de fauna, reptiles, aves y mamíferos que aunque viven en el hayedo son difíciles de ver por la cantidad de turistas que hay semanalmente entre sus sendas.
Rutas para la visita al Hayedo de Tejera Negra
El Hayedo tiene varias rutas para visitar, dos de ellas circulares: la «Senda de Carretas» de dificultad media-baja, que parte del aparcamiento del Casarejo, y la “Senda del Robledal”, de dificultad alta por su largo recorrido, que parte del aparcamiento del Centro de Visitantes. Hay una tercera opción que es la ruta circular para bicicletas.
Hayedo de Tejera Negra. Foto: Ernesto Morán.
Es necesario reservar el aparcamiento
Con la entrada del invierno el Hayedo cierra al público los días de meteorológica adversa de nieve o hielo. El turista que quiera visitar el hayedo tiene que reservar aparcamiento en esta dirección.
Una vez confirmado el aparcamiento solo falta planificar la jornada con ropa cómoda y de abrigo, calzado apropiado, mapa, agua y comida y a disfrutar del Hayedo.
Recuerden que estamos en un entorno único, por lo que es primordial visitarlo causando el menor impacto posible para su correcta preservación
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