Una veintena de internos de la prisión de Herrera de la Mancha han despertado la admiración y arrancado el aplauso de las cientos de personas que han salido en la noche del Jueves Santo para ver la procesión de la Pasión del Cristo, en la que portan la imagen del Cristo de Herrera.
Aunque los reclusos, con el rostro descubierto, acompañan a su Cristo desde 2011, el fervor con el que lo mecen sorprende a los penitentes que participan en el desfile penitencial y al público que sigue la procesión, en la que confluyen cuatro hermandades de la localidad ciudadrealeña con una imaginería de gran riqueza.
Los internos, de segundo y tercer grado que disfrutan de permisos de salida y a los que les queda poco tiempo para cumplir su condena, empiezan a ensayar un mes y medio antes de desfilar, según ha señalado a Efe el director de la prisión, Marceliano García.
Ha explicado también que los 20 internos que han procesionado han sido seleccionados de entre los más de 50 que se prestaron voluntarios para «vivir este momento tan especial» y portar la imagen de madera tallada del Cristo de la Herrera, en una tradición de hace más de medio siglo.
El grupo de reclusos, cuyas edades oscilan entre los 25 y los 50 años, encabezan el desfile que sale a las ocho de la tarde de la sede de la Hermandad de la Virgen de los Dolores, que les acoge como cofrades.
La Hermandad confecciona cada año gratuitamente el hábito de los reclusos, que está compuesto por túnica blanca y capa negra, ya que casi nunca son los mismos, aunque este año han repetido dos, ha subrayado García.
Además del Cristo de Herrera que encabeza el desfile procesional de la Hermandad, han procesionado otros dos pasos: el Cristo de la Humildad y la Virgen de los Dolores, la titular de la asociación penitencial que desfiló por primera vez en 1945.
En los rostros de los porteadores del Cristo de Herrera se refleja la pasión y el respeto con el que lo mecen, y también el esfuerzo que realizan cuando lo elevan para saludar su llegada a la Ermita de la Veracruz, la Iglesia de la Asunción y al convento de las monjas franciscanas de clausura, quienes aguardan detrás de sus muros la procesión con las luces encendidas.
En el desfile procesional participan, además de la Hermandad de la Virgen de los Dolores, otras tres que confluyen en la Iglesia de la Asunción: la Hermandad de la Virgen de la Paz y Oración en el Huerto, con cuatro pasos costaleros; la Hermandad y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo en la Columna y María Santísima Consoladora de Afligidos, con las tallas del Cristo en la Columna y María Consoladora de Afligidos, obras del imaginero sevillano Luis Ortega Bru.
La Hermandad Ferroviaria de los Santos Arcángeles Miguel y Rafael y Divina Pastora con el paso de El Encuentro, también se une a la carrera oficial que se ha prolongado por espacio de tres horas tras las cuales los internos vuelven de nuevo a su rutina diaria en la prisión.