Ninguna comunidad cumple con la ley de morosidad, que fija un plazo máximo de 30 días para pagar las facturas. No obstante, CLM es de la que paga por debajo de la media nacional. Son datos de la asocaición de autónomos ATA, que pide vigilancia y sanciones por el incumplimento de la ley de morosidad, habitual en el sector privado y expecialmente en el público.
Las administraciones públicas tardan 85 días de media en pagar a los autónomos, casi tres veces más de los 30 días que marca la ley, mientras que Castilla-La Mancha paga en 80 días, según el informe elaborado por el Observatorio del Trabajo Autónomo de ATA referido al primer trimestre de este año.
El presidente de la Federación de Autónomos ATA, Lorenzo Amor, que ha presentado el informe en rueda de prensa, ha dicho tener «pánico y preocupación» por este hecho, y ha lanzado un órdago a los candidatos a alcaldes y presidentes de las comunidades autónomas en las próximas elecciones para que establezcan un recargo del 20 % a todos las administraciones que no cumplan.
En el caso de Castilla-La Mancha, los autónomos tardan en cobrar de la administración 80 días, según datos de marzo de 2015, un tiempo de espera por debajo del alcanzado en diciembre de 2014, cuando se tardaba 94 días, lo que supone que la región ha tenido un descenso en el tiempo de demora de 14 días, es decir, un 14,9 por ciento. «Las administraciones siguen siendo unas morosas y todas las comunidades autónomas incumplen la ley», ha asegurado Amor, que también ha pedido al Ministerio de Administraciones Públicas que ponga en marcha un buzón donde los proveedores puedan denunciar las malas prácticas y ha instado a la Comisión Nacional de la Competencia a asumir competencia al respecto.
También ha demandado la creación de un cuerpo de inspección que vigile la morosidad y el establecimiento de un régimen sancionador para todas aquellas administraciones que incumplan de forma reiterada. Amor ha insistido en que la ley de morosidad sigue siendo la norma con más número de insumisos en España por que prácticamente «no la cumple nadie, y en el sector público menos».
No obstante, Amor ha admitido que el plazo medio de pago en el conjunto de las administraciones públicas ha experimentado una leve reducción, el 5,6 % menos, al pasar de 90 días a diciembre de 2014 a los 85 en marzo de este año.
En concreto y desglosado, el período medio de pago de la Administración central ha bajado un 6,7 % este trimestre respecto al último de 2014 y se ha situado en 42 días, tres menos; la administración autonómica ha subido el 0,9 %, es decir 1 día, y se ha colocado en 107, mientras que las administraciones locales son las que más han disminuido, el 14,9 %, para fijar el período de pago en 63 días, 11 menos.
Amor se ha referido a las comunidades y ha dicho no entender que las autonomías «presuman de estabilidad presupuestaria y cumplimiento del objetivo de déficit» y tarden más de tres meses en pagar a los proveedores.
Según el informe de ATA, las comunidades autónomas que más infringen la ley de morosidad son Aragón (123 días de media de demora), seguida por Murcia (122) y Cataluña (120).
Con períodos de pago superiores a la media nacional (85 días) se sitúan Andalucía y la Comunidad Valenciana, con 119 días en ambos casos, y la Comunidad de Madrid, con unas administraciones públicas que tardan de media 92 días en hacer frente a las facturas que mantienen con sus proveedores.
Las comunidades menos morosas, aunque ninguna cumple los 30 días que marca la ley, son La Rioja, con unas administraciones públicas que pagan en 48 días de media; País Vasco, 51 días, y Galicia, 52. El informe también analiza la evolución de las comunidades autónomas y señala que 10 han logrado reducir los períodos de pago, Andalucía los ha mantenido intactos (119), mientras que seis lejos de reducirlos, los han aumentado.
El presidente de ATA ha destacado la subida en Galicia, que en tres meses ha incrementado los períodos de pago el 30,6 %, al pasar de 49 días en diciembre de 2014 a 64 de marzo.
El informe también analiza la morosidad en el sector privado en el primer trimestre del año, que se ha reducido el 1,2 %, es decir un día menos, al pasar de 84 días en diciembre a 83 en la actualidad. Por tamaño de las empresas, las compañías con más de 1.000 trabajadores son las que más tardan en pagar, hasta cuatro meses (125 días).
Por contra las empresas que cuentan entre 50 y 250 empleados tienen plazos de pago de 70 días y de 68 cuando se trata de microempresas con menos de 50 trabajadores y más de 9.