Toda una hazaña de Pablo Moraga que hasta ahora nadie había conseguido realizar en las condiciones que él lo ha hecho. No es de extrañar que el alpinista castellano-manchego se haya referido a la ascensión al caribeño Pico Duarte como algo que «fue muy duro».
El joven alpinista manzanareño Pablo Moraga ha logrado la ascensión más rápida del Pico Duarte (República Dominicana), de 3.098 metros de altura, el más alto del Caribe.
Ha empleado 15 horas y 15 minutos para completar un recorrido de 71 kilómetros, con 4.749 metros de desnivel positivo y 5.092 metros de desnivel negativo, algo que hasta ahora nadie había realizado.
El montañero ha relatado que ascendió a través de la ruta de la Ciénaga de Manabao y descendió por la ruta de Sabaneta, hasta una pequeña población llamada El Ingénito.
«Fue tremendamente duro: además del desnivel acumulado y la distancia, el barro y las lluvias constantes me obligaron a exprimir hasta el último gramo de energía que me quedaba. La mayor parte del tiempo corrí empapado de agua, con las zapatillas y casi todo el cuerpo embarrados», ha explicado Pablo Moraga en un nota de prensa.
El montañero manzanareño, que nació el 2 de agosto de 1994, ha reconocido que en algunos tramos fue muy complicado orientarse, ya que la ruta de Sabaneta es la menos frecuentada de todas las que suben al Pico Duarte y la vegetación era demasiado densa.
«Apenas podía apreciar el camino, no existen mapas detallados y tenía miedo de perderme», ha reconocido Moraga, a quien le han acompañado los dominicanos Vidal de La Cruz, su hijo Wirkin y el español Jorge Latorre.
«Su apoyo fue imprescindible para mí. Me acompañaron durante los últimos treinta kilómetros, los más difíciles. Sin ellos quizás no habría podido conseguir el récord. Así que les estoy muy agradecido por lo que hicieron», ha declarado.
Con este tipo de gestas deportivas, la ONG ‘Sonrisas y montañas’ y Pablo Moraga trabajarán conjuntamente para obtener los fondos necesarios para ampliar un colegio y construir una clínica en las comunidades rurales de la Cuenca Alta del Río San Juan (en el oeste de República Dominicana, provincia de San Juan), una de las zonas más remotas del país, donde más del 75 % de los hogares, con unas novecientas personas, vive en situación de pobreza.
‘Sonrisas y montañas’ es una asociación sin ánimo de lucro y mediante pruebas deportivas realizadas por un equipo propio trata de obtener fondos para colaborar con distintos proyectos sociales.
Durante el año 2012 construyó tres colegios en el sur de Nepal trabajando conjuntamente con la ONG Educanepal, y en 2014 escolarizó a 50 niños soldados e inició una intervención urgente contra la violencia sexual en la República Democrática del Congo, ambos proyectos con la organización Coopera.