Sí, le ha dejado boquiabierto. Tanto al arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, como al obispo de Moyobamba, Rafael Escudero. Ha sido durante el Festival de la Canción Misionera. Ellos habían elegido el 10 de picas y…
Esto es lo que ha sucedido.
El obispo de Moyobamba y el arzobispo de Toledo, junto al mago Rubini.
Pues sí. Se quedó boquiabierto. Porque el truco de magia que le hicieron le sorprendió hasta a él. Ha ocurrido esta mañana, durante el Festival de la Canción Misionera que se celebra en Toledo, cuando el mago Rubini, «un italiano de Argés», ha pedido la colaboración del mismísimo arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez; y del obispo de Moyobamba, Rafael Escudero, natural de Quintanar de la Orden.
Rubini les ha hecho que barajearan una baraja imaginaria, que no existía. Y que sacaran, también en su imaginación, una carta. Solo ellos dos sabían la elegida, el 10 de picas.
Acto seguido, el mago Rubini ha cogido una baraja, pero esta vez real. Y antes de dársela a los dos eclesiásticos, les ha pedido que dijeran en voz alta, delante de todos los participantes, la que habían pensado. Segundos después, en la baraja real todas estaban colocadas de forma uniforme excepto una, que se encontraba al revés.
¿Saben cuál era? Efectivamente, han acertado, el 10 de picas.
Y tanto Braulio como Rafael alucinaban…