Bajo el lema «Para IU lo importante son las personas», este partido en Castilla-La Mancha propone un programa electoral que se basa en la lucha contra el paro y la apuesta por los servicios sociales, que aboga por destinar 500 millones de euros para empleo en 2015 y el 7 por 100 del PIB a educación.
Éstas son algunas de las propuestas que ha expuesto el candidato de IU a la Presidencia de la Junta, Alejandro Ávila, en una entrevista a la Agencia Efe, en la que ha indicado que la primera medida que tomaría si lograra la victoria el 24 de mayo sería «garantizar que las personas que no tienen un salario y están al borde de la exclusión social puedan tener un techo, agua y luz, y garantizar una renta mínima para que puedan comer tres veces al día».
Para apoyar la creación de empleo, dirigido a los colectivos más desfavorecidos en un primer momento, IU apuesta por destinar en 2015 unos 500 millones de euros a planes de empleo y, en los años siguientes hasta 900 millones anuales -que sería el 10 por 100 del presupuesto-.
Estos puestos de trabajo se crearían en sectores que existen «pero no interesa descubrirlos», en palabras de Ávila, como la dependencia, la ecología y la reforestación.
También señala el empleo público y recuerda que en la última legislatura, sólo en educación, se han reducido 6.000 plazas de profesorado «a pesar de que los alumnos han aumentado».
En esta línea, apuesta por recuperar las plantillas de docentes, reducir la ratio de alumnos por aula, mejorar el transporte escolar, que «vuelvan los comedores escolares, más necesarios que nunca» y la reapertura de las escuelas rurales que se han cerrado por no llegar al mínimo de once alumnos, un umbral que rebajaría a cinco niños por clase, ya que «a partir de cinco, es rentable socialmente».
Para todo ello, propone destinar el 7 por 100 del Productor Interior Bruto a las partidas de educación.
En sanidad, ha abogado por dotar de personal y medios necesarios y si bien se ha mostrado partidario de construir las infraestructuras que se precisen para prestar una correcta atención sanitaria a la población, ha hecho especial hincapié en la mejora de la atención primaria.
«Es vital que haya centros de atención primaria cercanos a los ciudadanos, muy bien equipados y con el personal suficiente para que esa atención sea más directa, más rápida y de menos relevancia que cuando un paciente llega a urgencias de un hospital», ha destacado Ávila.
Y todo ello llevado a cabo, según sus estimaciones, con «una fiscalidad progresiva, para que paguen más los que más tienen» y con una banca pública, que facilite el acceso al crédito de las pymes y autónomos.
En cuanto a sus perspectivas electorales y las consecuencias que pueda tener para IU la aparición de nuevas formaciones políticas como Podemos o Ciudadanos, Ávila se ha mostrado convencido de que su partidos conseguirá los suficientes votos para poder tener representación en las Cortes y aunque ha admitido que no manejan encuestas propias por no disponer de «medios suficientes», ha sostenido que cuentan con «la encuesta que más vale».
Este sondeo al que apunta Ávila consiste en que «IU ha aumentado casi en un 30 por 100 las candidaturas municipales en comparación con hace 4 años», lo que para este candidato se traduce en: «tenemos más organización, más afiliación y cada vez más gente que nos escucha y nos sigue».
Con todo, ha señalado que «es posible que la aparición de nuevos partidos pueda afectar» a IU, aunque ha considerado que la irrupción de nuevas formaciones «es beneficioso porque se rompen endogamias y bipartidismos».
Al mismo tiempo, se ha mostrado cauto y a la espera de ver «la deriva que tomen en la siguientes fechas» estos nuevos partidos, porque «la ideología siempre ha sido muy importante y si el sistema del bipartidismo se hunde y se crean partidos basados en la premisa de que la ideología no vale, que la izquierda o la derecha es un tema menor, sí puede hacer daño».
«Es vital la ideología y es más necesario que nunca IU», ha reivindicado Ávila, para quien el ciclo político no termina con las elecciones del 24 de mayo, sino que llega hasta final de año, con los comicios generales.
Ante este escenario, Ávila se plantea como reto «acabar con el bipartidismo en Castilla-La Mancha y acabar con las políticas de ajuste del PP».
Y ante este fin del bipartidismo, IU se muestra partidario de «una política de alianzas y pactos en torno a contenidos políticos y propuestas y no en torno a sillones» y ha avanzado que su formación «estará de acuerdo en quitar a quienes realizan políticas de ajuste duro contra los ciudadanos», lo que no significa «entrar en un gobierno con otras fuerzas políticas», sino que puede consistir en «acuerdos puntuales para tomar decisiones favorables a los ciudadanos».