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domingo, 12 de enero de 2025
El arroyo Salchicha es una de las rutas naturales propuestas por Enrique García.
El arroyo Salchicha es una de las rutas naturales propuestas por Enrique García.
Se recogen en un libro de Enrique García - 12 enero 2025 - Toledo

Hace pocas fechas fue presentado en Toledo el libro10 paseos en torno a Toledo para disfrutar y hacer ejercicio’, de Enrique García Gómez, una oportunidad para que los toledanos conozacan esas otras rutas, además de la vuelta al Valle, que se pueden hacer en el entorno de la ciudad para hacer ejercicio conociendo la extensa riqueza natural, paisajística y patrimonial que tienen muy cerca de donde viven. Y sin necesidad de ser senderistas, dirigidas a personas que quieran darse unos paseos muy enriquecedores desde todos los puntos de vista.

Distancias que oscilan entre los 4 los 9 kilómetros

La propuesta incluye distancias que oscilan entre los 4 los 9 kilómetros, que se pueden recorrer en una, dos y tres horas a lo sumo; los paseantes disponen de 10 rutas, circulares o lineales (de ida y vuelta) que serán una delicia para su salud y sus sentidos.


«Toledo es una ciudad privilegiada para dar paseos naturales. Todas las dificultades para hacer una ciudad compacta hacen a la vez que todos los barrios estén cerca del campo, de tal forma que se puede salir a él andando desde cualquier parte de la ciudad, haciendo unos recorridos maravillosos, seguros, fáciles, cómodos y muchas veces desconocidos, por el entorno inmediato», explica el autor.

Enrique García Gómez, firmando su libro.

Enrique García Gómez, firmando su libro.

Los 10 paseos naturales por Toledo

Arroyo aserradero y arroyo Salchicha: se recorren por el lecho de los arroyos, descubriendo por su cauce arroyos que llegan hasta el Tajo, a los pies de Toledo, siguiendo terrenos ya balizados, marcados, trazados. La abrupta orografía de Toledo hace que lleguen a ella pequeños arrollos, que solo circulan cuendo llueve mucho o en épocas de las cada vez más frecuentes danas. En el resto de los días se puede ir por ellos porque tienen una cuenca de recogida muy pequeña. Son unos auténticos museos de historia natural, vivos, porque contienen restos geológicos y los efectos de la erosión (se ven diversos sustratos y materiales). Los arroyos acaban en planicies, en tierras de cultivo.

Fuente del Moro (en el barrio del Polígono): se creó como una zona de expansión de Toledo y su polígono Industrial y llega hasta Santa Bárbara, con un mirador sobre las instalaciones deportivas.

Los Alcázares-Calabazas Altas: una zona al sur del Polígono menos conocida que la anterior y por ello más natural, con menos impacto de fuentes y bancos, en favor de un paisaje natural que aun hoy día rodea a la ciudad, con retamares… un conjunto paisajístico enriquecedor.

Paseo Los Alcázares-Calabazas Altas.

Paseo Los Alcázares-Calabazas Altas.

Alcántara-Polígono: paseo de los del camino natural del Tajo que discurre por la continuación de la senda ecológica aguas arriba, contorneando la finca Galiana. Tiene una riqueza muy interesante y es una senda muy cómoda y segura, cuya superficie es de tierra compactada. Y va cambiando con las épocas del año. Se pasa por bosques de olivera (talayales, alamedas, olmedas, choperas) y por plantaciones (maíz, alfalfa, pimiento).

Vía verde a Azucaica: no lleva ni un año abierta como tal. El abandonado tramo del ferrocarril Bargas-Toledo se habilitó para el senderismo y el paseo en bicicleta. Es un paseo muy cómodo y fácil para partir de Santa Bárbara y llegar al vivero educativo Taxus. Se puede seguir hasta Azucaica o dar la vuelta, completando un cómodo paseo cuyo desnivel es de casi cero. Ideal para personas con dificultades de movilidad o con necesidad de algún soporte para desplazarse ya que el firme está en condiciones perfectas.

Del arroyo Pozuela a Cobisa

Del arroyo Pozuela a Cobisa: «Es uno de los paseos sorprendentes porque cuando se habla de los pueblos de alrededor de Toledo parece que estén lejanos, sin embargo saliendo de la carrera de circunvalación del Valle, en un rato, por un camino muy bien definido, llega uno al paseo principal de Cobisa», explica el propio Enrique García, «pasando por el arroyo Pozuela y siguiendo por una zona de retemas, enebros y cantuesos hasta llegar a las proximidades de Cobisa, donde están los olivares que rodean el pueblo». Haciendo este paseo, uno aprecia lo cerca que está Toledo respecto de sus poblaciones colindantes.

San Martín (barrio)-La Bastida: se sale de la margen izquierda del río. Cruzando el puente de la Cava, se sigue por la calle Bastida, un callejón y entre cigarrales hasta el pinar de la Bastida, entre piedras, rocas, muros viejos de cigarrales y tapias. Aunque está cerca de la ciudad y entre edificaciones, resulta un paisaje muy agreste, como si uno estuviese en medio del campo, fuera de la civilización. Se bordea el pinar de la Bastida y se regresa por la zona del Ángel.

Senda del barrio San Martín-La Bastida.

Senda del barrio San Martín-La Bastida.

Baño de la Cava-Vistahermosa: se parte del Baño de la Cava (la planicie donde se desarrolla la leyenda toledana) y aguas abajo discurre por el camino natural del Tajo hasta Vistahermosa, todo el rato por senderos, una pista bien definida, cómoda, bordeando en una gran parte del terreno el campus universitario de la Fábrica de Armas y el vivero forestal central de la Junta, hasta llegar al chuletero. Es un paseo casi del todo fluvial, ya que no se aleja uno del río ni 15 metros en ningún momento, así que se pueden ver anátidas, especies propias de ribera, animales y vegetales. El sendero de tierra acaba en Vistahermosa.

Y claro, la vuelta al Valle: no puede faltar en Toledo. El autor ha integrado sus aspectos culturales, históricos y naturales. Ha intentado dar otra visión de un paseo monumental. Se ven el peñón de Toledo, el Alcázar, arroyos, roquedos, aves acuáticas…

Un rico paisaje vegetal

Los paseantes de estos senderos comprobarán que en muchas zonas se mantiene la flora natural de Toledo (encinares, retamares, tomillares), mezclados en otras zonas con plantaciones antrópicas (generadas por el ser humano), como los pinares; todo ello se liga con la vegetación agrícola del entorno, los tradicionales olivares, muy característicos de la provincia, y también con los cultivos.

El libro está editado por Ledoria, dentro de su colección ‘Toledo 10’, dirigido a un público general, no estudioso. «Se ha hablado hasta ahora poco del patrimonio natural de Toledo», justifica el autor.

Enrique García Gómez es doctor en medio ambiente, académico numerario de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo y adjunto a la Dirección del área de Fomento del Empleo, Desarrollo Económico, Turismo y Medio Ambiente de la Diputación de Toledo.

Portada del libro '10 paseen en torno a Toledo para disfrutar y hacer deporte'.

Portada del libro ’10 paseen en torno a Toledo para disfrutar y hacer deporte’.

 

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