En el tramo final de la campaña de recolección de la aceituna, ASAJA Ciudad Real ha denunciado que los agricultores se “sienten intimidados” con el modo de proceder de la Inspección de Trabajo, al desarrollarse con un número “desproporcionado” de agentes del orden público.
«Ataque a su trabajo»
Afirman que el despliegue en cada inspección de trabajo en el campo es tal que es percibido por el agricultor como un “ataque a su trabajo y al sector primario”.
Por eso, los olivareros trasladan la “creciente persecución” del sector, denunciando que se sienten “desatendidos, tratados como delincuentes y constantemente bajo la lupa de la Administración”.
Desde ASAJA Ciudad Real consideran que esta forma de proceder de la Inspección solo se podría justificar si se tuvieran indicios de peso para desmantelar alguna organización ilícita que explote a los trabajadores, no en controles rutinarios para saber si se cumple la normativa vigente.
Asimismo, la organización agraria recuerda que existen fórmulas más efectivas para combatir las posibles ilegalidades, basadas en controles preventivos a través de procedimientos administrativos.
Falta de mano de obra
ASAJA Ciudad Real asegura que es urgente poner en marcha políticas efectivas para solucionar el problema de la necesidad de mano de obra en el sector, de tal manera, que el Gobierno permita trabajar a aquellas personas a las que ha autorizado a entrar y permanecer en el país y, sin embargo, les niega poder firmar un contrato de trabajo por su situación irregular.