El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) ha concedido un permiso retribuido de tres semanas a un médico y a un enfermero de la UVI móvil de Motilla del Palancar (Cuenca) para trabajar en la atención sanitaria a las víctimas del terremoto de Nepal.
Según ha informado la consejería de Sanidad en una nota de prensa, estos dos profesionales se han desplazado a la región nepalí de Kabilash, a 50 kilómetros de Katmandú, una de las zonas más afectadas por el seísmo.
Tanto la médica como el enfermero pertenecen a la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario (GUETS), y han partido de Cuenca esta semana junto con otros miembros de la ONG Cooperación Internacional Dona Vida.
La región a la que se han trasladado es una de las zonas más afectadas por el seísmo. Ambos profesionales tienen una amplia experiencia en cooperación internacional, ya que en varias ocasiones se han colaborado con la ONG Cooperación Internacional Dona Vida.
En el comunicado, el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, ha mostrado su reconocimiento a estos dos profesionales «porque son un ejemplo de solidaridad para todo Castilla-La Mancha y demuestran una gran talla humana».
«Es un orgullo contar con profesionales dispuestas a trabajar en zonas como la de Kabilash, para colaborar en las tareas sanitarias que ayuden a la población víctima de este terremoto», ha añadido Echániz.