La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Castilla-La Mancha ha celebrado este martes en el espacio Coworking del ayuntamiento de Mora (Toledo) una jornada dedicada al olivar tradicional, en la que se han abordado aspectos clave para la sostenibilidad y el futuro del sector.
El evento ha contado con la participación del alcalde de Mora, Emilio Bravo; el secretario general de UPA Castilla-La Mancha, Julián Morcillo; la secretaria provincial de UPA Toledo, Elisa Fernández; Juan Carrasco, manager global de sostenibilidad de Deoleo; y Antonio Manzaneda, coordinador del proyecto europeo SOIL O-LIVE y profesor e investigador de la Universidad de Jaén.
140.000 hectáreas de olivar tradicional
Morcillo ha destacado la importancia del olivar tradicional, básico en la cultura y sociedad castellano-manchega, donde existen más de 140.000 hectáreas de este cultivo.
De hecho, el olivar ha adelantado al viñedo como principal cultivo de la región, algo que muestra su relevancia, las expectativas que este cultivo tiene, así como las peculiaridades de la propia planta y sus rendimientos, ha añadido.
El olivar ya supera al viñedo como principal cultivo de Castilla-La Mancha
Morcillo ha lamentado que la sequía está afectando a muchas zonas de cultivo, ya que los leñosos acumulan varios años sin humedad, condicionando las plantaciones.
Plataforma de Asesoramiento para el Olivar Tradicional
Durante la jornada, los asistentes han conocido de primera mano la nueva Plataforma de Asesoramiento para el Olivar Tradicional, presentada por David Erice, del gabinete de UPA Federal.
Esta plataforma, que ofrece 26 módulos formativos, está diseñada para ayudar a los olivareros en la gestión diaria de sus explotaciones, abordando temas como la fertilización, el riego, la poda, la digitalización, la recolección, la comercialización de la aceituna y el manejo del suelo, entre otros.
Ecorregímenes de la PAC
Erice ha repasado las modificaciones que se han introducido para esta nueva campaña en los ecorregímenes de la PAC (Política Agraria Común), como consecuencia del acuerdo que UPA firmó con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en abril del 2024.
Estos cambios han supuesto una simplificación muy importante para el caso del olivar y se ajustan mejor a la realidad del sector olivarero de la región, como la posibilidad de utilizar el ganado independientemente de la pendiente de la parcela; realizar las cubiertas en calles alternas, o la reducción de la superficie mínima que deben tener dichas cubiertas.