La Agencia Provincial de la Energía (Apet) de Toledo, depediente de la Diputación, está poniendo en marcha una medidas de ahorro energético dirigidas a los ayuntamientos, entre las que destacan la instalación de plantas de biogás (la primera va a ser en Gálvez) y el cambio de la iluminación en los ayuntamientos y los pueblos. Sobre esto último, la mayoría de los consistorios están conformes, ya que significa un ahorro de un 50 por 100.
El director de Investigación y Desarrollo de la APET, Luis Manuel Gallego, ha explicado esta mañana en rueda de prensa que con la instalación de plantas de biogás, además de ahorrar en la factura, se soluciona el problema medioambiental del estiércol y los purines. Gallego ha avanzado que «en breve», en cuanto se superen los trámites (como la supervisión de la Asociación Española de Biogás), se empezará a construir la planta, «en la que los ganaderos participarán», ha asegurado.
La construcción de la planta de biogás en Gálvez solucionaría los problemas de la comarca de los Montes de Toledo en los vertidos de purines y otros similares. Estas plantas obtienen energía a partir de la fermentación de la biomasa y su alto contenido en metano, que produce energía elécrica o térmica. Los ganaderos abastecerán a la planta de materia orgánica, consistente en estiércol líquido, productos agrícolas y residuos agroindustriales. De ahí vendría el beneficio para los ganaderos.
Asimismo, la APET también trabaja para cambiar las luminarias de los pueblos por luces LED, halógenos de Xenon y otras propuestas similares. Gallego ha especificado al respecto que con el aprovechamiento de la luz solar en las horas centrales del día, el coste de la factura será cero, mientras que el descenso en el consumo será de un 70 por 100 cuando sea necesario el aporte de las luces LED.
En cuanto a los costes que el cambio de la iluminación tendrá para los pueblos en plena crisis, el director de la APET ha avanzado que la empresa adjudicataria se hará cargo de la obra. «Se amortizará en parte con el ahorro en la factura, mientras que este será efectivo desde el primer mes», ha adelantado Gallego.
Por su parte, el presidente de la APET, David Díaz-Masa, ha dicho que se han encontrado con el problema del gasto en el alumbrado y en el combustible por parte de los ayuntamientos. Ante esto, la APET comenzó a trabajar en busca del ahorro energético. Ha revelado que escribieron a los ayuntamientos a ffin de estos les diesen poder para negociar por ellos con las empresas suministradoras, en colaboración con la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias).
Las empresas han ofertado un ahorro del 50 por 100 en la factura eléctrica recurriendo a sistemas como los de las luces LED. Tras el «filtro» llevado a cabo por la Diputación, dos o tres empresas seleccionadas son las que están a disposición de los ayuntamientos para que estos elijan la más conveniente.