Dani Fernández y Miguel de Cervantes están separados por siglos de historia, pero comparten un origen en común, Alcázar de San Juan.
El artista musical, que esta noche será el invitado de Pablo Motos en El Hormiguero, nació y creció en esta localidad manchega, donde descubrió su pasión por la música antes de dar el salto a los escenarios.
De familia de ferroviarios, hijo de Marcial y Mari Carmen, Dani se crio en el barrio de Goya, estudió en el cercano Colegio de Santa Clara y más tarde en el IES Juan Bosco. Su primera actuación en público fue en el escenario de un karaoke, dando inicio a una carrera que lo llevaría a lo más alto.
Tras alcanzar la fama con Auryn, Dani Fernández comenzó su andadura en solitario en 2018 y, desde entonces, no ha dejado de crecer. Su último álbum, ‘La Jauría’, ha sido un éxito absoluto, logrando el número uno en ventas y agotando las entradas del Wizink Center –ahora Movistar Arena– en varias ocasiones.
A pesar de su éxito, el cantante nunca ha olvidado sus raíces. En 2021, cuando fue pregonero de las Fiestas de Alcázar de San Juan, lo dejó claro: «Alcázar es mi casa, donde siempre quiero volver».
«Aquí están mi familia y mis amigos, que me siguen recordando mis raíces y que soy alcazareño. Soy quien soy gracias a mi pueblo», afirmó emocionado.
Alcázar de San Juan, ¿cuna de Miguel de Cervantes?
Una vinculación con Alcázar de San Juan que, aunque con siglos de diferencia entre ambos, también comparte con el escritor universal Miguel de Cervantes Saavedra.
La localidad reivindica con orgullo ser el auténtico lugar de nacimiento del autor de la novela más universal de la lengua castellana, Don Quijote de la Mancha, basándose en antiguas partidas de nacimiento halladas en la iglesia de Santa María la Mayor, disputándose así con Alcalá de Henares el título de la ciudad que vio nacer al escritor.
Más allá de esta conexión, Alcázar de San Juan es un municipio cargado de historia, tradición y cultura.
¿Qué ver en Alcázar de San Juan?
Sus molinos de viento, los ‘gigantes’ inmortalizados por Cervantes, dominan el paisaje manchego, recordando la esencia de Don Quijote. Su rica tradición vinícola, como sede de la Denominación de Origen La Mancha, y su vida cultural hacen de este lugar un referente dentro de Castilla-La Mancha.
- Molinos de viento: Emblema de La Mancha, los cuatro molinos de Alcázar de San Juan –de los 19 que hubo en su día– dominan el Cerro de San Antón. Desde su altura, ofrecen unas vistas inmejorables de la llanura manchega.
- Conjunto Palacial del Gran Prior: Antigua residencia de los caballeros de la Orden de San Juan, este conjunto arquitectónico alberga la iglesia de Santa María la Mayor, donde se encontraron documentos que sitúan el nacimiento de Cervantes en Alcázar. En este conjunto también se encuentras el Torreón del Gran Prior, una de las construcciones más icónicas de la ciudad, de origen medieval y símbolo del poder de la Orden en esta zona.
- Museo Casa del Hidalgo: Un viaje en el tiempo para conocer cómo vivían los hidalgos manchegos en el Siglo de Oro, que inspiraron a Miguel de Cervantes cuando creó el personaje Don Quijote de La Mancha.
- Complejo Lagunar de Alcázar de San Juan: Espacio natural protegido que forma parte de la Reserva de la Biosfera de La Mancha Húmeda y conformado por tres lagunas. Un paraíso para los amantes de la ornitología y la naturaleza.
Además de su patrimonio, una visita a Alcázar de San Juan también es una oportunidad para disfrutar de su rica gastronomía.
Platos como el pisto manchego, las gachas, los duelos y quebrantos o el inconfundible queso manchego, maridado con los excelentes vinos de la Denominación de Origen La Mancha, forman parte de la identidad de Alcázar y de toda su comarca. Para los más golosos, dulces tradicionales como la bizcochá o las flores manchegas ponen el broche final a una experiencia que deja huella.