El Ayuntamiento de Toledo comenzó el pasado mes de diciembre a retirar los vertidos de escombros, llegando a retirar 150 metros cúbicos de escombros en cinco puntos localizados de la ribera del Tajo, procediendo a su tratamiento en planta.
Una iniciativa que forma parte del Plan de Vertidos Cero puesto en marcha por el equipo de Gobierno para acabar con los 27 puntos de vertidos localizados gracias a la Cátedra del Tajo de la Universidad de Castilla-La Mancha y la Fundación Soliss.
El concejal de Medioambiente y Río Tajo, Rubén Lozano, ha explicado que se trata de «montañas de escombros que hacían un efecto llamada para que se siguiese depositando basura contaminante a orillas del río».
En este sentido, ha explicado que «desde que llegamos al Gobierno hemos pasado cerrado nueve puntos contaminantes en la ciudad, comenzamos con los baños públicos de la Peraleda, El Arroyo del Aserradero, el Matadero, o el vertido de los Cigarrales, y ya hemos limpiado también las riberas, con la retirada de escombros localizados en el visor de la Cátedra del Tajo UCLM -Soliss, principalmente en el polígono industrial».
Además, ha indicado Lozano, «seguimos trabajando en la eliminación del vertido en el Campus de la Fábrica de Armas de la Universidad de Castilla-La Mancha, nuestra intención es elaborar un proyecto para reutilizar toda el agua en el riego de las zonas verdes del campus».
