El Colegio Oficial de Médicos de Toledo ha expresado su «profunda preocupación» por el impacto que tendrá sobre la asistencia sanitaria de la provincia el acuerdo firmado entre las comunidades autónomas de Castilla-La Mancha y Madrid. «Nunca hemos sido consultados sobre el mismo, por lo que no hemos tenido la posibilidad de manifestar nuestra opinión con antelación», indica en nota de prensa.
Este acuerdo permite que una parte de la provincia de Toledo pase a ser atendida por el sistema sanitario de la Comunidad de Madrid. Aunque progresivo y voluntario, puede llegar a afectar a unos 126.000 habitantes de la provincia, un 29 por 100 de la población del área sanitaria del hospital de Toledo, «afectando incluso a zonas próximas y bien comunicadas con el hospital». Afirma que por esta asistencia, se llegará a pagar a Madrid unos 64,5 millones de euros en los próximos cuatro años, pago que se mantendrá en el tiempo.
Este colegio indica que está de acuerdo con la abolición de las «fronteras sanitarias» que se han creado entre comunidades autónomas. Considera que la informatización debe permitir la trazabilidad de esta asistencia. «Lejos de poner las administraciones al servicio del ciudadano, estas medidas han contribuido a someter al ciudadano a decisiones administrativas no claramente consensuadas con la población».
Dicho esto, este colegio manifiesta que la situación creada con el acuerdo entre Castilla-La Mancha y Madrid es bien distinta a la «libertad de circulación sanitaria que defendemos» pues «con este acuerdo hay una parte de la población que se asigna a otra comunidad autónoma, mientras que el resto debe recibir asistencia en el hospital de Toledo», que ahora atendería una población de unos 300.000 habitantes (un 60 por 100 de la atendida actualmente). Cree que «parece la excusa perfecta para hacer un hospital más pequeño y de menor dotación. Y esto nos dejaría al resto de los toledanos en una situación de desigualdad, pues si bien el nuevo hospital puede recibir una adecuada dotación tecnológica, lo cierto es que en muchas áreas de la medicina, la calidad depende del volumen de la actividad». Estima que un menor número de población atendida conlleva menos personal sanitario y menor experiencia del mismo, a lo que hay que añadir que será difícil atraer a profesionales de la máxima calidad a un centro pequeño y de poca actividad. «Un auténtico círculo vicioso que afectaría a la calidad, la investigación y la docencia. Un futuro que no deseamos para la provincia».
Por ello, transmite su preocupación a la sociedad toledana, dado que «consideramos que el acuerdo puede comprometer, a medio y largo plazo, nuestro futuro en una de las áreas que suponen mayor desarrollo y tienen mayor impacto social y económico, como es la sanidad. De forma indirecta se transfiere parte del presupuesto de nuestra comunidad a la de Madrid. Cuando en la construcción del nuevo hospital se escatima el dinero, se produce esta transferencia de presupuesto (y de asistencia, trabajo, desarrollo, investigación y futuro) a otra comunidad autónoma».
En estas circunstancias, este Colegio de Médicos expresa su oposición al proyecto porque «Toledo necesita un hospital del tamaño adecuado para su área sanitaria, y no debe reducirse ésta para justificar un hospital más pequeño y peor dotado».