La Asamblea en Defensa de la Sanidad Pública de Toledo ha convocado una concentración el próximo domingo, en la Plaza de Zocodover, de Toledo, para recordar que «la sanidad pública no se vende» y demandar que sea universal y de calidad porque «sigue estando en peligro, pese a que haya cambio político».
Así lo ha asegurado Marcos Zamora, miembro de la Asamblea, en rueda de prensa para dar cuenta de la concentración del domingo en Toledo (12:00 horas), en contra de la privatización de la sanidad pública y «para recordar a los que llegan al Gobierno que la sanidad solo tiene un nombre: que es pública, universal y de calidad».
El pediatra del Hospital ‘Virgen de la Salud’ ha invocado cinco puntos «irrenunciables» que, según la Asamblea, y contando «con la ciudadanía y los profesionales a la hora de solucionaros», pasa en primer lugar por la paralización inmediata de la privatización del nuevo hospital de Toledo.
«Sin menoscabo de su puesta en marcha, que sea 100 por 100 público, revertir la gestión planeada y firmada por el anterior Gobierno, cueste lo que cueste», ha concretado.
Además, «pedimos que se rompa el convenio sanitario con Madrid, que consideramos ignominioso», porque la atención a un tercio de la población de la zona norte de Toledo, en los hospitales privados «deficitarios» de Aranjuez y Parla, «tiene como único objetivo que sean reflotados con dinero de Castilla-La Mancha».
«En tercer lugar, que paren las derivaciones a clínicas privadas de Madrid, que se hacen con recursos públicos en beneficio de unos pocos y con un gran gasto económico por parte de nuestra comunidad», ha añadido Zamora, quien ha añadido que «padres y familiares» de derivados han denunciado «intervenciones mal practicadas» y sin la más mínima «profesionalidad» por las posteriores complicaciones.
Ha exigido, asimismo, que «todos los recursos, tanto sanitarios como sociales, de la Diputación de Toledo pasen de verdad al sistema público» y se elimine, así, «el foco de amiguismo y enchufismo, como ha sido hasta ahora» de la institución provincial.
Por último, ha demandado que «se paralice el deterioro de la Atención Primaria» que se ha producido estos cuatro últimos años porque «es uno de los pilares de la sanidad pública» y, por ello, ha aludido a la necesaria dotación de recursos humanos y materiales.
Estos cinco puntos «no son aplazables», según Zamora, «y aunque entendemos que muchos son temas complejos, porque están atados y bien atados, con muchas compensaciones económicas, tiene que primar, aunque suponga un importante esfuerzo económico, el rehacer lo que se ha desecho porque la sanidad pública no tiene precio».
«La sanidad no es un tema de partidos, sindicatos o instituciones», ha subrayado Zamora, quien ha hecho un llamamiento a la ciudadanía de Toledo para que «se junte el domingo con nosotros y entre todos seamos capaces de aunar nuestra voz y recordar a los políticos de que la sanidad no se vende, sino que se defiende».
Zamora ha incidido en que «el diálogo» con los profesionales es esencial «para encontrar soluciones racionales» y ha concluido: «Hay que hacer un gran pacto por la sanidad pública, con independencia de los intereses económicos, políticos y sindicales».