lunes, 25 de noviembre de 2024
En el parque La Atalaya 02/07/2015junio 8th, 2017

La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha absuelto a A.A.H. de un delito de violación supuestamente cometido contra su expareja, ocurrido en el parque La Atalaya de la capital manchega en 2010.

Según la sentencia hecha pública hoy por la Audiencia Provincial, el sospechoso queda absuelto de todos los delitos después de tener en cuenta las declaraciones que la víctima vertió en el juicio oral y que han impedido concluir suficientemente que la mujer fuera violada.


La sala ha considerado que quedó probado durante el juicio que el procesado mantuvo durante tres meses una relación de noviazgo con M.E.D.B., que concluyó a finales de octubre de 2010.

Tras la ruptura, el 6 de noviembre de este mismo año y a petición del procesado, se citaron los implicados para tomar algo y hablar, a lo que accedió la mujer, a quien el procesado recogió a la salida de su trabajo alrededor de las 17.30 horas y continuaron por diversos locales hasta aproximadamente las 00.30 horas.

Según la sentencia, a esa hora ambos estaban dentro del vehículo conducido por el encartado y se dirigieron al parque forestal de la Atalaya de Ciudad Real, lugar donde el acusado estacionó el vehículo y en el que ambos permanecieron hasta las 5.35 horas del día siguiente.

Durante ese tiempo, M.E.D.B. remitió un mensaje telefónico a una amiga a la que solicitaba ayuda porque estaba siendo violentada por el acusado que, según dijo la mujer en el mensaje, estaba desnudo sobre ella, algo que pudo comprobar la policía que acudió al lugar tras ser avisada por la amiga de la víctima.

Tras acudir al lugar, la policía recogió a la víctima que fue explorada por los médicos, quienes determinaron que la mujer tenía dos erosiones leves (en cuello y brazo derecho), compatibles con sujeción leve, dolor y ligero eritema en ambas manos, sin lesiones genitales evidentes.

La sala no ha podido contar con pruebas contundentes que evidencien que existió tal intención, ya que estas dos personas pasaron muchas horas juntos sin que el procesado llevara a cabo la satisfacción de su deseo sexual hasta un momento tardío.

Además, la víctima manifestó en el juicio que durante las cuatro horas que duró la retención en el coche estuvo luchando, hubo violencia y él estuvo encima de ella durante todo el tiempo, y sin embargo las lesiones que presentaba eran erosiones leves en brazos y cuello, sin lesiones genitales y sin constatar lesiones traumáticas, que si bien son compatibles con sujeción también lo son con unas relaciones sexuales normales, según se deduce de los Informes Forenses.

Según la sentencia, sorprende que, pese a la declarada intención del acusado y el modo violento de dirigirse durante los hechos, permitiese hasta cuatro intentos de fuga de la víctima, uno de los cuales aprovechó para mandar el mensaje de socorro.

Sin embargo, a la sala le sorprende que la víctima no aprovechase para alejarse del lugar, dando aviso telefónico, por cuanto no sólo se lo permitió el acusado, cuando este se encontraba completamente desnudo y, en consecuencia, con muy limitadas facultades de persecución.

(Visited 19 times, 1 visits today)