Asaja Cuenca ha exigido que se garantice el desarrollo de la actividad profesional de los agricultores afectados «con o sin ATC», tras el informe favorable del Consejo de Seguridad Nuclear y la decisión del Gobierno regional de declarar la comarca como espacio de la Red Natura.
En un comunicado, Asaja Cuenca ha comentado que si se instala en Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares en Villar de Cañas (Cuenca), la comunidad científica internacional «deberá afianzar la seguridad de los cultivos de la zona, su normal desarrollo y, como consecuencia, la viabilidad de las explotaciones de los afectados».
Por el contrario, si se amplía el espacio de la Red Natura reconocido en la Laguna del Hito, en Cuenca, de 1.000 a 25.000 hectáreas protegidas, Asaja Cuenca también ha exigido «medidas que compensen el esfuerzo de los agricultores, pues si quien contamina paga, quien conserva debe cobrar».
Así, el presidente de la organización agraria, José María Fresneda, ha destacado que no entrará en el debate político o mediático, pero sí lo hará «para defender los intereses de los agricultores y ganaderos afectados por la zona, independientemente de si se instala o no finalmente» el ATC, como así se lo manifestó en marzo de 2010 a la Plataforma contra el Cementerio Nuclear en Cuenca y a la Administración.
De este modo, «todo sobrecoste generado al agricultor o ganadero por afecciones en el desarrollo normal de los cultivos o por limitaciones medioambientales debe ser compensado», ha declarado la organización agraria.
Asaja Cuenca ha añadido que las prohibiciones o dificultades en la actividad «pueden limitar el derecho de todo agricultor y ganadero a decidir libremente sobre la disposición de su explotación en atención a los mercados y a las coyunturas económicas existentes en cada momento», por lo que «se tienen que prever indemnizaciones ante cualquier hecho que frene la actividad y la viabilidad de las explotaciones».