Los industriales y la Consejería de Agricultura prevén que la campaña de vendimia sea normal, sin problemas en cuanto a su desarrollo y a la capacidad de las bodegas, ya que la cosecha puede ser incluso menor de la esperada debido a las altas temperaturas que se están registrando.
Así lo han avanzado el director general de la Asociación Empresarial Vitivinícola de Castilla-La Mancha (Vinos CLM), Manuel Civera y el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo.
A preguntas de los periodistas sobre las perspectivas de la vendimia, Civera ha comentado que se espera que sea un año bueno pero normal «sin ninguna excepcionalidad en ningún sentido»
Civera ha señalado que las existencias de vino y de mosto en las bodegas son las normales, con las medias habituales de las últimas campañas y ha apuntado que debido a que la vendimia viene un poco adelantada y al calor «es posible que haya menos cosecha de la que se esperaba».
En similares términos se ha expresado Martínez Arroyo, quien ha explicado que se espera una vendimia muy normal, «que se va a desarrollar sin problemas».
El consejero ha añadido: «Nosotros vamos a estar siempre pendientes trabajando con el sector desde ya, con las organizaciones agrarias, con las organizaciones vitivinícolas, con todos aquellos que representan algo en este sector».
En este sentido, ha adelantado que la próxima semana se mantendrá una reunión con las asociaciones representativas de la Interprofesional de Valdepeñas, que es la primera que habitualmente comienza a trabajar, porque es donde antes se inicia la vendimia en la región
Martínez Arroyo y Civera han hecho estas declaraciones tras la reunión que han mantenido hoy en Toledo para analizar determinados aspectos como un modelo de contrato-tipo que pueda servir para la próxima campaña.
El consejero ha recordado que hay que tener en cuenta «que entramos en una nueva etapa en la que los contratos son obligatorios en todos los productos» y ha avanzado: «Nosotros vamos a estar muy vigilantes de que esto sea así, es una garantía para el comprador, para el vendedor y para las bodegas».
También es una garantía para las bodegas que venden vino a otras bodegas, muchas de ellas del mundo cooperativo, ha comentado Martínez Arroyo, que ha adelantado que la Consejería tiene la intención de que esos modelos de contratos se generalicen «y se puedan alcanzar unos mínimos en toda la región en todas las compraventas de uva y posteriormente de vino».
Civera ha mostrado al consejero el modelo de contrato que va a utilizar Vinos-CLM para adecuarse a la nueva obligación de pago a 30 días desde la última entrega de uva
Ha destacado que es un contrato que no solo se adecúa a las obligaciones legales, «sino que se ha hecho con la intención de que el agricultor vea el compromiso por la parte empresarial de atender esta medida», aun cuando el 80 % de la uva de la región va a cooperativas, ha explicado.