La Red Española de Inmigración ha condenado el cierre del comedor social que gestionaba Mensajeros de la Paz en Recas (Toledo), decisión tomada por esta organización tras el requisito impuesto por el Ayuntamiento del municipio de impedir el acceso a los niños no empadronados.
En un comunicado, la Red Española de Inmigración ha mostrado su apoyo a la organización que preside el padre Ángel y ha solicitado la «ágil» intervención del Gobierno de Castilla-La Mancha.
Así, la red pide a la Junta que proceda «de forma urgente» y en coordinación con la Diputación Provincial de Toledo y otras instituciones públicas a dar una respuesta inmediata a las necesidades de reubicación de Mensajeros de la Paz.
«Desde la Red Española de Inmigración censuramos la actitud xenófoba de la alcaldesa», afirma el comunicado, ya que a su juicio la regidora de Recas «ha impuesto una visión personalista y sesgada, basada en el odio al diferente».
La red pide al Gobierno que preside Emiliano García-Page «su implicación directa para garantizar que no se pierda este servicio público y altruista, así como el compromiso de todas las formaciones políticas progresistas en defensa de la igualdad», añade la nota.
El padre Ángel avanzó el lunes a Efe que su intención es mantener el comedor social que tiene la organización en Recas, y que atiende a 68 niños, aunque no ha aceptado el requisito impuesto por el Ayuntamiento de pedir el empadronamiento a los niños que acuden a comer.
Por su parte, la alcaldesa, Laura Fernández, indicó a Efe que la nueva corporación municipal propuso a Mensajeros de la Paz exigir el empadronamiento para evitar la ocupación ilegal de viviendas en el pueblo, un problema «importante», que ha aumentado desde que el comedor social abrió y que está dificultando la convivencia en Recas.
LA JUNTA CONTACTA CON EL PADRE ÁNGEL
Por otro lado, la Consejería de Bienestar Social ha contactado con el presidente de Mensajeros de la Paz, el padre Ángel, para resolver el problema creado con el comedor infantil. El delegado de la Junta en Toledo, Javier Nicolás, ha explicado que ayer mismo responsables de la Consejería contactaron con Mensajeros de la Paz para estudiar «cómo podemos ayudar para que este fin social que se está haciendo en Recas se pueda mantener, ahí o en cualquier otro sitio».
El padre Ángel tiene la intención de mantener el comedor social que la organización tiene en Recas, y que atiende a 68 niños, aunque no ha aceptado el requisito impuesto por la nueva alcaldesa de pedir el empadronamiento a los niños que acuden a comer.
El sacerdote explicó ayer que había pedido apoyo por carta al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y a la presidenta regional del PP, María Dolores de Cospedal, y el delegado de la Junta ha indicado que la Consejería de Bienestar Social ya ha contactado con el padre Ángel.
«A la gente que está pasando necesidad no se le tiene que preguntar de dónde es o no, hay que ayudarla», ha dicho Nicolás, quien ha indicado que la Junta «siempre está abierta» para resolver problemas de comedores sociales.