El Consejo Consultivo de CLM informó en contra del convenio sanitario con Madrid mientras que el de Madrid lo defendió como muy positivo para los intereses de esta comunidad autónoma, ya que cuadraba las cuentas en hospitales ineficientes y deficitarios como los de Aranjuez y Parla.
El Consejo Consultivo de CLM informó en contra del convenio sanitario con Madrid, según ha dado a conocer hoy el portavoz del Gobierno de CLM, Nacho Hernando, tras destacar algunos párrafos favorables al acuerdo del Consejo Consultivo de Madrid, que veía en la firma la ocasión de rentabilizar pequeños hospitales del sur de la comunidad vecina, como los de Parla y Aranjuez. Este dato nunca fue revelado por el Gobierno saliente ni por el exconsejero de Sanidad, Ignacio Echániz.
“El convenio nos relega a una posición de ciudadanos de segunda”, afirmó Hernando, quien añadió que “no es un convenio, es un contrato, donde una parte da un servicio y la otra lo paga”. “¿Por qué tenemos que subvencionar con dinero de todos los castellano-manchegos los hospitales ineficientes de la Comunidad de Madrid?”, se preguntó. Y se respondió: “Es el último favor de la exconsejra Cospedal a la Comunidad de Madrid”.
Es más, explicó el portavoz: El acuerdo recoge que Castilla-La Mancha paga por los pacientes que potencialmente se pueden acoger al convenio, que son más de 125.000 y no por los que efectivamente acudan a los hospitales de Madrid acogidos al acuerdo. Por el momento, según reveló recientemente el consejero de Sanidad, apenas 10.000 pacientes de la provincia de Toledo han solicitado asistencia en esos centros.
El Gobierno de CLM, que estudia denunciar el convenio sanitario con Madrid, como avanzó el presidente de la Junta, Emiliano García-Page a encastillamancha.es, cree que ese tipo de prestaciones sanitarias entre comunidades autónomas debería cubrirlas el Fondo de Cohesión del Estado, que aparece sin dotación económica en los Presupuestos Generales de 2016.
Nacho Hernando también ha criticado la rebelión de alcaldes del PP que piden que se mantenga el convenio sanitario y se ha preguntado “¿por qué no se rebelaron contra su presidenta, Cospedal; durante los cuatro años que tardó en firmar el convenio?; en 2011 había un acuerdo, Cospedal lo aniquiló y lo firmó en precampaña electoral”.
El informe del Consejo Consultivo de Madrid se mostró muy favorable al acuerdo, porque, según ha relatado el portavoz del Ejecutivo castellano-manchego “establecía un sistema de pago capitativo; es decir pagan todas las personas que pueden acoger al convenio, independientemente de si van o no van”. Por lo tanto, CLM tendría que pagar a Madrid casi 65 millones de euros por 126.000 pacientes potenciales, aunque la cifra que acuda realmente sea menor.
El citado Consejo también recogió que los hospitales de Parla y Aranjuez, que son los que están disponibles para los pacientes del Norte de Toledo “no tienen volumen de actividad suficiente para rentabilizar los recursos mínimos necesarios y tienen capacidad excedentaria de los recursos disponibles” y que el convenio permite disminuir las aportaciones complementarias que el Gobierno de la Comunidad de Madrid tendría que hacer para compensar la cuenta resultados de esos centros.