La operación que puso en marcha la Guardia Civil se denominó «Transalp» y finalizó con la detención de una persona, la imputación de otras cuatro y el esclarecimiento de 11 delitos de robo que se cometieron tanto en Tomelloso (Ciudad Real) como en poblaciones cercanas, tal y como ha informado la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha.
Uno de los transformadores robados, de donde extraían el cobre.
Una organización que estaba especializada en robar en explotaciones agrícolas, de donde se llevaban los transformadores eléctricos para extraerles el cobre y, además, desvalijaban las casas de campo.
Las investigaciones comenzaron cuando se detectó que varios robos se habían realizado por el mismo procedimiento, por lo que tras obtener una serie de pruebas e indicios lograron identificar a tres individuos de nacionalidad rumana como presuntos autores.
Tras vigilarles durante varios días, comprobaron que vendían el cobre robado en una recuperadora de Tomelloso. Por lo que procedieron a registrar la vivienda del detenido y principal sospechoso y donde, efectivamente, hallaron gran cantidad de efectos que procedían de los citados robos.
El detenido es un joven de 26 años, que responde a las iniciales I.M.; y se ha imputado a P.M., de 51 años; y a D.V.M., de 25, los tres vecinos de Tomelloso. Además, la imputación se extiende a T.C.T., de 33 años; y a S.C.Y., de 29, ambos españoles y residentes en la misma localidad, como presuntos autores de un delito de receptación.
Los agentes recuperaron 300 kilos de cobre.