La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha condenado a siete años y medio de prisión a Luis Miguel V.D., un policía nacional jubilado, como responsable de dos delitos de homicidio en grado de tentativa, al atacar a su abogada y al marido de ésta, cuando la letrada se negó a seguir defendiéndolo.
La Audiencia ciudadrealeña ha considerado probado que el acusado se dirigió el 12 de noviembre de 2013 al despacho de la abogada Amparo N.T. armado con un cuchillo de cocina y un punzón, con el fin de acabar con la vida de la letrada, que había llevado los litigios de la separación y divorcio del procesado de su exconyuge.
Según se indica en la sentencia, tras negarse la abogada a seguir defendiendo los intereses del acusado, éste determinó acabar con la vida de la letrada, por lo que se presentó en su despacho profesional, creyendo que se encontraba sola en su interio.
Acudió al despacho pertrechado con un cuchillo de cocina con filo de sierra de 21 centímetros de longitud total y 11,5 centímetros de hoja y un punzón con mango redondo de madera, ocultando su rostro mediante un gorro de lana y una bufanda y portando guantes de plásticos en sus manos.
Una vez en el despacho, el procesado agarró por el cuello a la abogada mientras asía el cuchillo «con el fin de asestarle una puñalada», lo que fue impedido por el marido de la letrada Antonio D.F., que se interpuso físicamente entre su mujer y el agresor.
El atacante le clavó el cuchillo en la zona preauricular y cervical alta izquierda y se inició un forcejeo entre ambos, mientras que la abogada trató sin éxito de llamar a la policía, por lo que decidió huir del despacho saltando por encima de los hombres, logrando salir a la calle pidiendo auxilio, tras lo cual, el acusado la persiguió con las mismas intenciones de acabar con su vida, según ha entendido el tribunal.
Como consecuencia de la agresión, Antonio D.F. sufrió lesiones de «extrema gravedad y serio riesgo vital que hubieran podido causar la muerte del no haber mediado la pronta y eficaz atención en el lugar de los hechos por un sanitario que se encontraba cerca y de los médicos del Hospital General de Ciudad Real, a donde fue inmediatamente trasladado».
Por estos hechos, la Audiencia de Ciudad Real ha condenado al procesado a una pena de cinco años de prisión como autor de un delito de homicidio en grado de tentativa acabada, en el caso de la agresión a su exabogada, y a dos años y medio de prisión por otro delito de homicidio en grado de tentativa inacabada, por agredir el marido de la letrada.
También lo ha condenado a permanecer alejado a una distancia no inferior a 200 metros de las víctimas durante trece años y a indemnizar a Antonio D.F. con 23.395 euros por las secuelas sufridas y con 6.800 euros por los días de incapacidad que sufrió.
En cambio, lo ha absuelto de los delitos de lesiones agravadas y allanamiento de despacho profesional que le imputaba la acusación particular.
Asimismo, la Audiencia Provincial de Ciudad Real ha entendido que concurre la circunstancia atenuante de enajenación mental del condenado, ya que está diagnosticado de trastorno ansioso-depresivo, trastorno mixto de personalidad (paranoide y evitativo) y trastorno adaptativo relacionado con la separación conyugal.