El PP de Castilla-La Mancha ha considerado hoy que la intención del Gobierno regional es «dulcificar» su negativa a suprimir por ley los privilegios de los expresidentes y ha afirmado: «Pueden maquillar todo lo que quieran, pero Page consiente que Bono siga teniendo esos privilegios».
La diputada del PP en las Cortes de Castilla-La Mancha Claudia Alonso se ha referido en rueda de prensa a la decisión tomada ayer por el Consejo de Gobierno de comenzar los trámites para formalizar la renuncia de los expresidentes a estas prerrogativas.
«Llegamos a sospechar que se están realizando cierto tipo de tejemanejes para que Bono tenga esos privilegios», ha opinado Alonso, quien ha afirmado que el exmandatario regional José María Barreda se encontraba ayer «más que incómodo», pues al igual que María Dolores de Cospedal nunca ha hecho uso de estos privilegios.
A juicio de la parlamentaria del PP, García-Page «le debe mucho a Bono» porque fue, según ha dicho, la persona que fraguó el pacto de «perdedores» entre el PSOE y Podemos para permitir su investidura.
«La realidad es que Bono es la única persona que mantiene estos privilegios, el PSOE es el único que quiere seguir manteniendo estos privilegios y por mucho que intenten dulcificar la cuestión, lo único que tienen que hacer es llegar a estas Cortes y proponer derogar los artículos de la ley del Gobierno y el Consejo Consultivo que permiten actualmente que haya presidentes que sigan teniendo estos privilegios», ha afirmado Alonso.
Y, con ello, ha insistido en que Bono es el único que los disfruta, porque Cospedal y Barreda no han hecho uso de ellos «en ningún momento».