El convenio estatal de industrias cárnicas, firmado el pasado viernes, afecta a unos 6.000 trabajadores de Castilla-La Mancha, en su mayoría de las provincias de Toledo y Cuenca, y a más de 90.000 en el conjunto del país.
Según ha informado CCOO en un comunicado, el convenio establece subidas salariales del 1 % para 2015, con carácter retroactivo al 1 de enero de este año con independencia de la fecha de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el 1,5 % para 2016 y otro 1,5 % para 2017.
CCOO ha valorado de forma muy positiva la firma de este convenio, que «pone de manifiesto la utilidad del sindicalismo de clase y supone un paso adelante en el mantenimiento de todos los derechos y en la mejora del poder adquisitivo de las trabajadoras y trabajadores del sector cárnico».
El convenio recupera la cláusula de garantía salarial al final de la vigencia, operando solo al alza en el caso de que el IPC de los tres años sea superior a los incrementos salariales acordados, y contemplar crear un grupo de trabajo para mejorar el texto sobre temas de clasificación profesional, formación, régimen sancionador y regulación del fijo discontinuo, entre otros puntos.
El convenio estatal de industrias cárnicas, el más potente de la industria de la alimentación, afecta a más de 3.000 empresas en el país, entre ellas algunas ubicadas en Castilla-La Mancha como Incarlopsa, Loriente, Tello o Campofrío.
En Castilla-La Mancha, las industrias cárnicas emplean a unas 6.000 personas, sobre todo en las provincias de Toledo (unos 2.400) y Cuenca (más de 1.500).