La presidenta de la Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha (Femp), Mayte Fernández, ha pedido hoy al Gobierno central parar la reforma local, pues supone -ha advertido- que más de 110.000 personas de la región, «las más débiles y desamparadas, se queden sin asistencia social»
«Cuando un gobierno se equivoca debe rectificar y el Gobierno de Rajoy se ha equivocado», ha opinado Fernández, según ha informado la Femp en nota de prensa.
Ha argumentado que desde 2013, cuando fue impulsada la reforma, se «ha conseguido unir a todos los partidos políticos, menos el PP, así como a numerosas asociaciones del ámbito social, en su rechazo conjunto a la aplicación de la ley».
Además, la presidenta regional de la Femp ha avisado de que si entra en vigor «dejarán de prestarse servicios tan necesarios para muchos ciudadanos» de la región como las «becas de comedor, la ayuda en el hogar, ayudas para el alquiler de viviendas, suministros energéticos o alimentación».
«Sin olvidarnos de la pérdida de servicios al ciudadano tan indispensables como los de respiro familiar en atención a dependientes, programas de mayores y centros de día, teleasistencia, albergues o atención a mujeres víctimas de violencia de género», ha afirmado.